El ministro de Producción y Trabajo Dante Sica justificó las medidas tomadas por Aerolíneas Argentinas contra 376 trabajadores por haberse sumado a las asambleas y quites de colaboración del pasado 8 de noviembre, que generaron demoras y suspensiones de vuelos.
“Por la forma en la que protestaron, otros que querían trabajar, no lo pudieron hacer. Hubo abandono de tareas, pero las suspensiones son una potestad de la empresa”, consideró Sica, defendiendo la decisión de las autoridades de Aerolíneas Argentinas de sancionar con suspensiones a 376 trabajadores que “abandonaron o retuvieron tareas” durante la medida de fuerza. Frente a esta decisión de la empresa, los distintos gremios aeronáuticos definieron un paro para el próximo lunes 26.
Sica también afirmó: “Una cuestión es lo que tiene que ver con los salarios en función de lo que son los tipos de trabajo y después está la posición política de cada gremio. Los gremios tienen que tener una mirada en defender los derechos de los trabajadores. No pueden estar haciendo medida de fuerza en función de lo que creen que debería ser la política aeronáutica de Argentina o en función de los que ellos creen que debería conducirse Aerolíneas Argentinas”.
En cuanto al anuncio de la nueva medida de fuerza gremial, el ministro opinó: “Después cada uno podrá tomar su posición política. Lo que nos interesa es cuáles son las formas en que van a actuar para defender los derechos de los trabajadores y tienen que hacerlo dentro de las normativas legales en la cual estamos sujetos”.
Rubén Fernández, secretario general de la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA), informó que los gremios aún no recibieron la oficialización de las suspensiones pero afirmó que se trata de “una represalia ilegal”. “Sancionar por una protesta está condenado por la Organización Internacional del Trabajo. Sancionar por un reclamo a trabajadores a los que les pagaron mal el salario es totalmente injusto, ilegal e inconstitucional”, concluyó el dirigente.