Casi en simultáneo con la propuesta de que Julio Cordero, integrante de la Unión Industrial Argentina (UIA) y hombre del Grupo Techint, reemplace al despedido Omar Yasín al frente de la Secretaría de Trabajo, la siderúrgica Tenaris planteó críticas a las medidas de fuerza llevadas adelante en las últimas semanas por la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y amenazó veladamente a sus trabajadores con despidos si continuaban con medidas de fuerza para reclamar aumentos de salarios.
Después de que Yasín fuera despedido en el marco del escándalo por el aumento de 48% en los sueldos del Presidente Javier Milei, de la vicepresidenta Victoria Villarruel y de los integrantes del Gabinete de ministros, empezó a sonar el nombre de Cordero para reemplazarlo (a propuesta del jefe de Gabinete Nicolás Posse y del “asesor” sin cargo Federico Sturzenegger, según trascendió). Cordero tuvo un momento de visibilidad en los últimos meses, cuando participó en el debate en el Congreso Nacional sobre la reducción de obras de trabajo. Allí el representante de la UIA se opuso de plano a la iniciativa planteando: “Trabajar menos, ¿para qué?, ¿está mal trabajar?”.
Dictan la conciliación obligatoria sobre el plan de paros escalonados de la UOM
En el marco del endurecimiento de las políticas oficiales en relación con el movimiento obrero, la gigante siderúrgica del Grupo Techint hizo circular entre sus trabajadores un comunicado cuestionando las medidas de fuerza que se llevaron adelante en los últimos meses, en el marco del reclamo gremial de la UOM por una urgente recomposición salarial acorde con la inflación.
El gremio encabezado por Abel Furlán reclama reclama aumentos mensuales acordes a la evolución inflacionaria, lo que fue rechazado por el sector patronal. Voceros gremiales explicaron: “En el contexto hiperinflacionario que atraviesa nuestro país, con fuerte suba en el precio de la canasta básica alimentaria, ratificamos la justa demanda de preservación del poder adquisitivo mediante los correspondientes incrementos salariales mensuales equivalentes al índice de precios al consumidor”.
La UOM anunció tres paros nacionales escalonados y progresivos para marzo
En este sentido, desde la UOM denunciaron que la Cámara Argentina del Acero aplica “incrementos dolarizados, mensuales, permanentes y sostenidos” sobre los bienes de acero que producen, mientras que ofrecen incrementos salariales mucho menores a los trabajadores. “Como resultado de la combinación de este sideral aumento de precios y de la caída del poder adquisitivo de los salarios, las empresas del sector se benefician con una caída abrupta del costo laboral unitario”, concluyeron.
Desde Tenaris-Siderca consideró que la del pasado 6 de marzo se trató de una “medida de fuerza fuera de contexto e incomprensible”, que además “solo afectó a Siderca”: “El paro de actividades definido por la entidad gremial afectó únicamente las operaciones de Siderca. En efecto, ni el resto de las empresas de la Cámara (principalmente Siderar en San Nicolas y las plantas de Acindar) fueron afectados por la medida mencionada. Tampoco el resto de las plantas con trabajadores de la UOM (de la rama Metalmecánica) tuvieron afectación, ya que trabajaron normalmente bajo el régimen de conciliación obligatoria”. La empresa no da cuenta de que en el resto de las ramas metalúrgicas la medida de fuerza no se aplicó por la aplicación de una “conciliación obligatoria”.
La UOM logró un acuerdo para la rama siderúrgica, que el Grupo Techint se negó a firmar.
Mientras la paritaria de la UOM para su sector siderúrgico sigue trabada en la cartera laboral (ahora encabezada por un hombre de Techint), la empresa concluyó su comunicación con una velada amenaza de despidos: “Estas medidas ponen en riesgo el cumplimiento a los pedidos de nuestros clientes y la futura disponibilidad de fuentes de trabajo”.