En el marco del conflicto por la definición sobre el nuevo Salario Mínimo Vital y Móvil y la inminente ofensiva del Gobierno de Javier Milei contra el sistema de obras sociales sindicales, la Confederación General del Trabajo (CGT) avanza con la definición de un nuevo paro General contra las políticas antiobreras del oficialismo.
Tras la fallida reunión del Consejo del Salario de la semana pasada, el cotitular cegetista Pablo Moyano remarcó: “En el Consejo del Salario el gobierno nunca nos dio oportunidad de charlar con los empresarios, es una modalidad del Gobierno llevarse por delante cualquier posibilidad de negociación. El Consejo de la CGT está autorizado para tomar las medidas necesarias, no vamos a poner fechas todavía, pero se está discutiendo el paro general”.
El Gobierno planea otra ofensiva por decreto contra las obras sociales sindicales
En el mismo sentido, el dirigente camionero remarcó que marzo “será un mes muy conflictivo” y sostuvo que “el interior del país es un polvorín”, por lo que la CGT “está discutiendo” la posibilidad de un nuevo paro general, tras el del pasado 24 de enero, el primero contra la administración de Milei.
También Jorge Sola, titular del Sindicato del Seguro y secretario de Prensa y Comunicación de la CGT anticipó medidas de fuerza y cuestionó directamente al presidente Milei, que la semana pasada aseguró que no intervendrá en el tema de la fijación del Salario Mínimo, pese a que la ley obliga al Gobierno nacional a laudar ante la falta de acuerdo entre el sector gremial y el empresarial: “El Presidente habla con desconocimiento de la ley que rige sobre el salario mínimo, vital y móvil, porque es una obligación por parte del Gobierno, a través de la Secretaría de Estado. Tiene que laudar cuando no se llega a los dos tercios de los votos en el Consejo del Salario”.
“De igual manera, la medida de fuerza no está atado a esto, la conflictividad está creciendo cada vez y está siendo por actividades, que seguramente terminará en una general. Por ejemplo, esta semana está llamado a un paro por parte de los conductores de trenes, a mediados de semana. Esto va a empezar a suceder en muchos lados”, añadió el dirigente.
Y enfatizó: “Solo en enero, en la construcción, y de empleos directos y formales, se destruyeron 55 mil puestos de trabajo. Sumado a que las paritarias están en discusión y muchas veces no se alcanza para pagar el salario, más la disparada de precios, y los aumentos de energía en febrero, marzo y abril, efectivamente, medidas de fuerza van a haber por sectores y seguramente generales”.