En las últimas horas la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) y la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA) acordaron el pago de una Asignación Extraordinaria no Remunerativa de $150.000 para los trabajadores del sector semillero en todo el territorio nacional.
Respecto del convenio fue rubricado con Alfredo Paseyro, director Ejecutivo de ASA, que se implementará a partir del 10 de enero de 2024, el secretario General del gremio José Voytenco remarcó: “En el marco de las actuales circunstancias económicas, buscamos llevar certidumbre y tranquilidad a los trabajadores del sector”.
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La rúbrica de esta asignación para los trabajadores de la cadena semillera nació a partir de un trabajo coordinado con instituciones vinculadas a la agroindustria, un eje en donde el gremio se enfocó con fuerza. Este hecho no es aislado, porque este eslabón de la agroindustria llevo a cabo desde hace tiempo un trabajo serio para reducir su informalidad y mejorar las condiciones de trabajo de sus empleados. “Nuestro objetivo es generar convenios con cámaras del sector y desarrollar estrategias conjuntas para el bien común”, remarcó Voytenco.
La entidad que nuclea a los semilleros está compuesta por 80 empresas, que generan 26.000 puestos de trabajo directos en todo el país. Se trata de un sector que factura U$S 1.300 millones al año y provee al mercado el 90% de las semillas sembradas de maíz, girasol, soja y trigo. Su producción de semillas abarca 480.000 hectáreas distribuidas en 15 provincias y llevan a cabo sus ensayos en una superficie estimada en 50.000 hectáreas.
Según detallaron desde la UATRE, la escala para poner en marcha la asignación será de $ 150.000 para personal con permanencia igual o mayor a 6 meses, de $ 75.000 para aquellos con permanencia menor a 6 meses y mayor a 30 días y de $ 30.000 para el personal con permanencia menor a 30 días.
Voytenco, de UATRE, prometió “defender con firmeza los derechos de los trabajadores rurales”
El gremio remarcó también su compromiso de “redoblar esfuerzos” para acompañar a los trabajadores del sector “en un cierre de año complejo para la economía, a partir de los recientes anuncios del Gobierno nacional y su impacto en la capacidad adquisitiva del salario”. Además, señalaron la existencia de “un clima enrarecido para los derechos laborales de los trabajadores”. Sin embargo, aún en ese marco, la acción conjunta de UATRE y ASA busca “transmitir tranquilidad a los trabajadores del sector, esperando que las demás representaciones patronales imiten esta sana iniciativa”.
“No perdemos de vista la necesidad de incorporar a nuestros convenios colectivos nuevos beneficios en materia de capacitación, obra social y fondo complementario jubilatorio para nuestros trabajadores”, concluyó Voytenco.