Este viernes el Departamento de Trabajo de los Estados Unidos confirmó que tras el fuerte retroceso de la pandemia continúa recuperándose paulatinamente el empleo, con una baja de la tasa de desempleo e importantes incrementos salariales, lo que preocupa a la Reserva Federal (FED), que busca fijar la inflación anual en una cifra cercana al 2%.
Según se detalló, las nóminas laborales no agrícolas sumaron 187.000 puestos de trabajo durante julio (aunque los datos de junio fueron corregidos a la baja, pasando de 209.000 a 185.000). El dato superó las previsiones, que apuntaban a cerca de 200.000 nuevos empleos.
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Asi, la tasa de desempleo retrocedió al 3,5% (restando 1 décimo en comparación con el mes previo), una cifra mucho menor que la última mediana de FED, que marcaba un 4,1% para el cuarto trimestre. Estos datos muestran, sin embargo, que la economía estadounidense necesita crear cerca de 100.000 empleos mensuales, para equiparar el crecimiento poblacional.
El informe mostró también que los salarios por hora siguieron aumentando en promedio en julio un 0,4%, redondeando un incremento de 4,4% en términos interanuales. Esta cifra, sin embargo, es demasiado alta para los objetivos inflacionarios de la FED, que apunta a bajar la inflación del país al 2%.