Tras la decisión oficial de flexibilizar las limitaciones para la adquisición y manejo libre de divisas por parte de las empresas petroleras, el Gobierno nacional espera que hasta 2026 las empresas vuelquen hasta 40 mil millones de dólares como inversiones en nuestro país. Por otro lado, YPF prohibió la importación de combustibles de origen ruso, en el marco de las dificultades internacionales creadas por el conflicto bélico en Ucrania.
El decreto que flexibilizó el acceso a divisas para las empresas del sector aún no se hizo público, pero ya se anticiparon algunos de los ejes del nuevo “Régimen Acceso a Divisas para la Producción Incremental de Petróleo” (RADPID), que también se aplica para las productoras de gas. Con esta iniciativa, las empresas del sector ahora podrán acceder al Mercado Libre de Cambios, por montos equivalentes a su volumen de producción incremental, pudiendo destinar las divisas obtenidas al pago de capital e intereses de pasivos comerciales o financieros con el exterior, incluyendo pasivos con compañías vinculadas no residentes y utilidades o dividendos, así como a la repatriación de inversiones directas de no residentes.
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Con este proyecto, el Gobierno espera motorizar la llegada de inversiones para escalar la producción hidrocarburífera, sobre todo en Vaca Muerta, y revertir el déficit de la balanza comercial energética. Para 2022 se espera que ingresen unos 6 mil millones de dólares, llegando a los 40 mil para 2026.
Por otro lado, en las últimas horas YPF confirmó que prohibió la importación de nafta y gasoil de origen ruso “debido a eventos que son de conocimiento público a nivel mundial”. Desde la empresa explicaron que la decisión obedece a las dificultades que las empresas armadoras experimentan para operar con productos rusos en el marco de las complicaciones internacionales derivadas de la invasión rusia a Ucrania y las sanciones que fueron aplicadas sobre la economía del país liderado por Vladimir Putin.
