Los principales gremios de Uruguay, junto con el apoyo de las organizaciones sociales, lograron avanzar con una recolección de firmas multitudinaria para que la denominada Ley de Urgente Consideración (LUC), piedra basal de la administración de Luis Lacalle Pou, sea puesta en discusión en un referendo popular.
La normativa impone, de acuerdo a los sindicatos, un severo ajuste en el Estado que se verá traducido en recortes de puestos laborales, menor recaudación y baja de la actividad económica. Por eso, los colectivos sindicales, organizaciones sociales, sindicales, feministas y ambientalistas, mayormente opositores, se movilizaron para reunir exactamente 797.261 firmas.
La Corte ahora deberá validarlas para que se acceda a la consulta, pero en la Comisión Pro-Referendo dan por hecho que, aún con errores y eventuales tachas, el número está consolidado. La respuesta oficial llegó rápidamente: Lacalle Pou afirmó en conferencia de prensa que «cuando la Corte (Electoral) verifique si se llegó” a la cifra exigida -un 25% del padrón electoral, cerca de 672.000- hará “los análisis políticos».
«Hoy tenemos la palabra de quienes propiciaron este recurso. De llegarse, daremos el debate. Nos han escuchado en campaña electoral, durante el principio del gobierno, difundir las ideas, el documento, el anteproyecto y después la ley», agregó Lacalle, quien insistió en que la LUC “es una buena ley, y por eso la impulsamos”.
“Muchas de las firmas son venidas de Argentina, y fue un aporte muy valioso. La alegría es enorme, porque pasamos en más de 120 mil las firmas requeridas. Esto es una satisfacción y asegura que habrá referendo. Trabajamos incansablemente recorriendo cada plaza, cada barrio, cada hospital”, remarcaron desde PIT-CNT, la principal central