El más reciente informe del Centro de Economía Política (CEPA) sobre despidos y suspensiones informa que sólo durante el mes de agosto se registraron 6233 despidos y suspensiones, principalmente en el sector industrial. La cifra es similar a la de julio y duplica la del mismo mes del año pasado.
Las principales razones del importante retroceso en el empleo tienen que ver con las políticas de reducción de empleo estatal y la fuerte crisis industrial en curso (entre ambos sectores concentraron el 91% de los problemas de empleo).
Uno de cada ocho despidos en lo que va del año (39.027) se explican por cierre de empresas (en el sector industrial la relación es de 1 de cada 6), lo que constituye un índice de la gravedad y profundidad del problema ya que se trata de puestos de trabajo mucho más difíciles de recuperar que en el caso de una suspensión o reducción de personal que mantuviera el emprendimiento en marcha.
Desagregando las 39.027 desvinculaciones laborales del año, el informe detalla que 32.838 fueron despidos (4.907 por cierre de empresas o plantas), 720 retiros voluntarios, 60 renuncias con indemnización, 4.679 suspensiones y 800 adelanto de vacaciones. En un análisis por sector se puede apreciar que 23.727 despidos o suspensiones correspondieron al empleo privado y otros 15 mil al sector público.
El informe de CEPA destaca que “en los primeros dos meses del año los despidos del sector público resultaron más significativos, en los siguientes cinco meses, tomaron ‘la posta’ los despidos del sector privado, para finalmente, en agosto, converger en despidos del sector público y privado casi por igual”.
