Este lunes, las autoridades sanitarias chilenas confirmaron que extenderán por 30 días más un cierre de fronteras para viajeros pese a leves signos de mejoría que ha mostrado la evolución de la pandemia.
A pesar a una rápida y masiva campaña de vacunación contra el COVID-19, en las últimas semanas el creciente aumento de casos y presión sobre el sistema hospitalario había obligado a imponer nuevas cuarentenas en buena parte del país sudamericano.
«La situación sanitaria evidentemente muestra algunos muy leves signos de mejoría (…), sin embargo, también hemos decidido que la transición será más estricta en algunos niveles y además se renovará el cierre de las fronteras por 30 días», dijo el ministro de Salud, Enrique Paris, en la entrega del reporte sanitario.
«Aunque observamos ciertas señales positivas en relación al menor número de casos y también levemente positivas en relación a la disponibilidad de camas (…) nos tenemos que mantener en alerta», agregó.
Con respecto a las restricciones, se mantiene la prohibición de viajes de ciudadanos desde el país a menos que sea por motivos especiales e impide la llegada de personas extranjeras no residentes.
Por otro lado, las autoridades sanitarias anunciaron una primera fase de desconfinamiento de algunos municipios de la capital, Santiago, aunque con mayores restricciones de aforos y prohibición de funcionamientos de servicios como gimnasios en espacios cerrados, así como casinos.
En relación a los colegios, señalaron que aquellos que deseen podrían funcionar en la transición con protocolos sanitarios estrictos ya que los brotes en esos establecimientos son bajos.