Más de 80 cámaras representantes de pequeñas y medianas empresas (pymes) firmaron este domingo un documento en el que instan a los bancos privados y públicos a poner en marcha mecanismos financieros que permitan «superar de la mejor y más rápida manera los efectos de la inactividad” económica por el coronavirus, para evitar el corte de la cadena de pagos.
Entre los firmantes se destacan la Confederación General Económica (CGE); la Confederación General Empresaria (Cgera); la Asamblea de los Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme); la Cámara de la Industria del Calzado (CIC); la Asociación de Concesionarios de Automotores (Acara); y la Cámara Argentina de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica Argentina (Camima).
En el documento de 96 páginas rubricadas, las entidades señalan que “el stock de cheques diferidos negociados por las PyMEs en poder de los bancos ronda los $ 220.000 millones”, de los cuales “entre el 35 y 40 % vence en abril, es decir durante y post cuarentena obligatoria” lo que muestra la gravedad de la situación.
La primera propuesta que integra la iniciativa es “que las entidades financieras actúen como banca de crédito y cubran los cheques de aquellos clientes que siempre han cumplido para que se acrediten en las cuentas que lo depositaron”.
También piden el otorgamiento de “un plazo lógico por estas deudas con baja tasa de interés tomando como referencia el 24% que ofrece el Gobierno”; y que el Banco Central, de ser necesario modifique normativas, para que los bancos no tengan dificultades para facilitar la operatoria mencionada.
Además, los representantes del sector pidieron “reperfilar las deudas de las pymes con las entidades financieras” y que el Estado destine fondos “para que no se corte la cadena de pagos bajo ningún concepto”, siempre con la idea de evitar el cierre de éstas empresas que generan el 80% del empleo en Argentina.
El documento enfatizó que los tres eslabones que sufren la inactividad económica son, en primer lugar, el comercio “que compró mercaderías antes del 19 de marzo y emitió cheques para fechas posteriores” con la imposibilidad de cubrir los valores en esta situación. En segundo término se encuentra el distribuidor mayorista o la industria pyme, que tendrán gran cantidad de estos cheques en cartera o entregados a la entidad financiera en forma anticipada, con el riesgo de que sean rechazados. En tanto, el último eslabón “es la mediana o gran empresa proveedora de los anteriores, que tiene en su poder o entregados gran parte de estos cheques, o directos de las entidades financieras, que de ser rechazados generarán gran conflicto”.
Otras entidades firmantes son la Cámara Argentina de Industria del Juguete (CAIJ); la Cámara Argentina de Industrias Ópticas y Afines (Cadioa); la Cámara Argentina de Fabricantes de Avíos e Insumos para la Confección y Marroquinería (Cafaicym); la Cámara Argentina del Gas Natural y Comprimido; la Mesa Nacional de Unidad Pyme; y federaciones económicas y empresarias de Chaco, Chubut, Río Negro, Santa Fe y Catamarca, entre otras.
La solicitada que conlleva el reclamo que se viene realizando desde hace 30 días pidiendo la cobertura bancaria de los cheques de “sus clientes”, se suma a los distintos reclamos que en los últimos días vienen realizando las pymes frente al parate de la actividad económica producido por la pandemia del coronavirus y el aislamiento social obligatorio decretado para evitar su propagación. Aislamiento que en el inicio de su séptima semana, para muchas actividades ya resulta “un suicidio”.