Después del aumento de 2,5% aplicado el sábado pasado, la petrolera estatal YPF decidió un nuevo incremento de casi 10%, que comenzó a regir a partir de las 0 horas de este martes. La petrolera Axion aplicó un aumento similar.
El aumento decidido por YPF para sus combustibles es en promedio de 8% en el interior del país y de 9,5% en Ciudad de Buenos Aires y el área metropolitana. Con este nuevo incremento, la petrolera líder en el mercado nacional acumula un aumento del 12% en menos de una semana. El aumento de entre 1 y 2,5% del sábado se justificó por la entrada en vigencia del ajuste automático de impuestos sobre los combustibles que se rige por la inflación (impuesto a la transferencia de los combustibles) y un aumento del precio de los biocombustibles, un componente obligatorio de los combustibles nacionales que sigue teniendo un precio directamente regulado por el Gobierno.
Con este incremento, el precio del litro de nafta súper en CABA y el Conurbano pasó de $30,34 a $33,23, mientras que la premium aumentó $36,42 a $39,88 (en algunas barrios ya supera los 40 pesos), el valor del diésel de $26,38 a $28,89 y el Infinia diésel de $31,65 a $34,65.
En el caso de Axión, el ajuste fue de entre 10 y 12%, en línea con lo ya aplicado por Shell el día sábado. En los surtidores de la empresa el litro de súper costará $33,48, la premium $40,58, el gasoil $29,38 y el gasoil euro 35,58 pesos.
La cartera de Energía conducida por Javier Iguacel (recientemente degradada de Ministerio a Secretaría) anticipó que está trabajando en un esquema de contención de precios a través de la fijación de un “precio de referencia” que se le propondrá al directorio de YPF para establecer así un programa de incremento de las naftas paulatino pero acorde al mercado mundial. Un funcionario del área explicó a Infobae que “no se trata de un control de precios porque el Gobierno no puede hacer eso. Simplemente sugiere a YPF un precio de referencia en función de una ecuación de los precios internacionales y la competencia local”.