Mientras se lleva adelante un paro petrolero en la zona de hidrocarburos no convencionales Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén, por la muerte de un trabajador en un accidente laboral sucedido este lunes (y de otros tres heridos por un incidente en otro pozo), se confirmó que en lo que va del año ya son 5 los obreros que perdieron la vida en las distintas explotaciones hidrocarburíferas del yacimiento.
El accidente en el que perdió la vida Marcelino Ariel Sajama, ocurrió durante la mañana del lunes en el área Aguada del Chivato, operada por la empresa Medanito, mientras que los tres heridos fueron en un pozo de Bajo del Choique-La Invernada, a cargo de ExxonMobil (en este último caso el gremio denunció “maltrato hacia el personal”).
Según el secretario general del Sindicato de Petroleros Privados, Jorge Ávila, el accidente se produjo mientras Sajama realizaba tareas de mantenimiento eléctrico por la falla del embrague de una bomba. Según fuentes gremiales, el accidente se debería a problemas de “falta de mantenimiento”. El operario fallecido era un tercerizado de la petrolera Medanito, a través de la prestataria de servicios Clear Petroleum. Y es precisamente en este sector de trabajadores donde se registra la mayor cantidad de accidentes laborales ya que, según se denuncia, son obligados a trabajar casi sin medidas de seguridad.
El mismo día de la muerte de Sajama, otros tres trabajadores resultaron gravemente heridos en el yacimiento Bajo del Choique-La Invernada (también en Vaca Muerta), en este caso operado por la compañía ExxonMobile.
En enero de 2017 el Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, encabezado por Guillermo Pereyra, acordó con las petroleras y el gobierno una reforma del convenio laboral, que fue festejada con una señal de razonabilidad gremial en la única iniciativa nacional que venía logrando convocar inversiones extranjeras, la explotación de hidrocarburos no convencionales de Vaca muerta.
Luego este acuerdo fue reforzado en octubre del año pasado por una iniciativa de “blindaje” o “marco de entendimiento sectorial”, destinada a abrir nuevas instancias de diálogo que eviten la paralización productiva por la adhesión a paros nacionales como el del 25 de septiembre. Sin embargo, la “pax petrolera” saltó por los aires esta semana, confirmándose un paro por 24 horas luego de que una quinta víctima fatal se sumara al luctuoso balance del año.
Ante el nuevo accidente, el sindicato petrolero encabezado por Pereyra lanzó un paro de 24 horas que concluirá este miércoles a las 20, denunciando negligencias y maltrato laboral por parte de las petroleras. El gremialista manifestó: “La muerte de un trabajador y tres heridos, uno de ellos de gravedad, muestran claramente un proceso de relajamiento de las medidas de seguridad por parte de las empresas. No puede ser que con tal de avanzar dejen de lado al trabajador”.
Y concluyó: “Exigimos que se tomen las medidas de seguridad necesarias para garantizar la vida y el bienestar de los trabajadores. Parece que estuviéramos predicando en el desierto porque a las empresas solo les importa cumplir con los tiempos y se hacen los distraídos a la hora de tomar medidas para proteger a los compañeros. Esto no puede seguir así”.
