Este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) presentó su informe mensual sobre el Índice de Precios al Consumidor (IPC), que para el mes de septiembre mostró un incremento de precios de 3,5% en relación con el mes previo, acumulando un alza total del 101,6% en los primeros nueve meses del año.
Esta cifra de inflación, que logró romper el “piso” del 4% de inflación mensual que se había mantenido durante los últimos tres meses, se logró sobre todo gracias al impacto de la reducción de alícuotas del impuesto PAIS (del 17,5% al 7,5%) para el acceso a divisas para pagar importaciones.
Desde el oficialismo, celebraron el dato como un logro, remarcando que se trata de la inflación “más baja en los últimos tres años”, (desde noviembre 2021), lo que implica que en cualquier caso tras la brutal política recesiva aplicada se está llegando recién a valores promedio de los dos primeros años de gestión del gobierno previo (2020 cerró con un 36,15% de inflación anual y 2021 con 50,93%). El festejo oficial se basa en la comparación con el pico inflacionario sin matizar el dato con otros números tan preocupantes como la sostenida caída en las ventas y el consumo de alimentos, medicamentos y otros bienes básicos, producto de la recesión y de la pérdida general de poder adquisitivo.
Según detallaron desde el organismo estadístico, el rubro que registró los mayores aumentos durante el noveno mes del año fue el de “Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles”, con un aumento de 7,3%, especialmente por los aumentos de las tarifas de servicios. El segundo rubro con más crecimiento es el de “Prendas de vestir y calzado” (6%). Las divisiones con menores incrementos fueron Bebidas alcohólicas y tabaco (2,2%) y Recreación y cultura (2,1%).