Después de que el Gobierno nacional finalmente lograra blindar en la sesión de este miércoles de la Cámara de Diputados el veto del presidente Javier Milei a la ley de Financiamiento Universitario, los distintos gremios de las universidades nacionales están llevando adelante este jueves un nuevo paro por 24 horas. Mientras el oficialismo celebraba su logro parlamentario, se multiplicaban las tomas de facultades y rectorados las universidades de todo el país.
“Repudiamos a las y los diputados que votaron en contra del mandato popular de defender la universidad”, manifestaron desde el Frente Sindical de Universidades Nacionales en el comunicado donde convocaron al “paro total” que se lleva adelante jueves, con el el objetivo de “consolidar del plan de lucha en defensa del salario y el presupuesto universitario”.
Y agregaron: “La voluntad popular ha sido defraudada y la democracia ha cedido al manejo antirepublicano de gobernar por decreto del Gobierno Nacional. Se conformó una alianza política que es incapaz de conmoverse ante el sufrimiento de las grandes mayorías, ante el reclamo de todos los sectores por sostener aquello que es fundamental: la universidad pública, la educación pública”.
Después de la aprobación en Diputados, no sólo se sostuvieron las tomas que ya habían comenzado en distintas facultades de la Univesidad de Buenos Aires (UBA), incluyendo Filosofía, Psicología, Sociales, Veterinaria y otras, sino que también se sumaron medidas de fuerza (ocupaciones, tomas, vigilias y asambleas) en la Universidad Nacional de La Plata y en las de Córdoba, Tucumán, Salta, Jujuy, San Juan, Misiones, Entre Ríos, San Luis, Cuyo, Comahue, Luján, Mar del Plata, del Sur, del Centro de la provincia de Buenos Aires y Litoral, además de numerosas universidades del conurbano, como la de La Matanza, José C. Paz, General Sarmiento, Moreno, Lomas de Zamora, San Martin y Tres de Febrero, entre otras que se van sumando hora a hora.
Desde el Frente Sindical universitario (Conadu, Conadu Histórica, Fedu, Ctera, Fagdut, FATUN y UDA) se reiteró “la voluntad de luchar para defender la universidad pública, la salud y la educación pública, las jubilaciones dignas, por niñeces protegidas y por un país igualitario”, para concluir: “Universidad pública de calidad para nuestro pueblo y salarios dignos para docentes y no docentes que la sostienen”.
