El Gobierno modificó el plan de moratoria previsional para ajustarlo a los reclamos del Fondo Monetario Internacional (FMI), segmentando su alcance y buscando que en lugar de las 800 mil personas a las que apuntaba originalmente sean sólo 500 mil, reduciendo el déficit que la iniciativa genera en las cuentas del Estado nacional. La medida se oficializó con su publicación en el Boletín Oficial.
El organismo de crédito internacional había cuestionado la moratoria previsional “imprevista” que había anunciado el oficialismo, tras lo que en la reglamentación del “Plan de Pago de Deuda Previsional” de ANSES, que se hizo público este martes, se ampliaron los requisitos para acceder a una jubilación sin los aportes necesarios, apuntando a que sólo accedan al beneficio los sectores más vulnerables.
El plan originalmente aprobado en el Congreso apuntaba a que accedan al mismo unas 800 mil personas, pero ahora se planteó como requisito un cruce de información entre ANSES, la AFIP y otros organismos para garantizar que sólo accedan al beneficio jubilatorio los sectores de menores ingresos.
Siguiendo los planteos del FMI contra la “superposición” de distintas líneas de asistencia, la reglamentación de la moratoria previsional ahora requiere renunciar a las “prestaciones que resulten incompatibles”, incluyendo planes sociales. En los casos de Pensiones No Contributivas se aclara que “se aplicará la baja de las mismas en el mismo mes de alta del beneficio solicitado”.
El control de estas incompatibilidades quedará a cargo de ANSES, en base a los cruces de información con otros organismos e incluirá el análisis de ingresos brutos anuales, el patrimonio del Impuesto sobre los Bienes Personales, tenencia de autos, embarcaciones o aviones, créditos prendarios, gastos y consumos efectuados con tarjetas de crédito y débito durante los 12 meses anteriores a la fecha de la evaluación.