Las farmacias de todo el país se encuentran en una situación de conflicto con el PAMI por falta de pago de las prestaciones a jubilados desde hace varios meses y podrían dejar de atender a los beneficiarios de la obra social.
El problema no es una novedad, pero día a día se agrava la situación, sobre todo para las farmacias pequeñas, que constituyen alrededor del 95% de este tipo de negocios en el país.
A través de un comunicado, la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA) detalló la situación que viven actualmente las farmacias de todo el país, que no se ha modificado desde hace cinco meses a esta parte.
A partir del 1° de septiembre todas las prestaciones realizadas por las farmacias a los jubilados -gran parte de ellas con cobertura al 100%- se encuentran parcialmente impagas, lo que genera un enorme “cuello de botella” para la flamante gestión que desembarcó en la obra social de los jubilados.
La deuda contraída se vuelve por momentos de una magnitud que hace inviable al instituto, pues se agrava en el contexto inflacionario y en el arrastre de años, donde los precios y los costos se modifican constantemente.
La cadena de funcionamiento del sistema del PAMI en el que acaba de asumir, Luana Volnovich, compone de laboratorios, droguerías y farmacias, que son el último eslabón antes de que llegue al público.
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Por último, en el comunicado solicitan a las autoridades el diseño de un programa de pago que permita salir del estado en el que se encuentran las farmacias, lo cual hace que éstas pierdan su capital de trabajo y se encuentren en graves dificultades para hacer frente a los compromisos económicos» contraídos.
