Según el más reciente estudio del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), el uso de la capacidad instalada en la industria manufacturera apenas llegó al 54,5% durante el mes de junio, una cifra inferior más baja que la de la crisis económica de 2002 y apenas 1,2% superior a los datos del peor momento de la pandemia. La comparación en términos interanuales, respecto del mismo mes del año pasado, confirma un desplome de 14,1%.
Estas cifras oficiales dan cuenta del gravísimo impacto negativo que están teniendo las políticas del Gobierno de Javier Milei sobre la economía nacional en su conjunto, tanto en lo que hace a la producción como al consumo y al empleo, registrándose en los últimos meses cifras comparables con las de las peores crisis económicas de los últimos 20 años.
En un análisis desglosado puede verse que los sectores con mayor retroceso son los de las industrias metálicas básicas, que registraron un 56,6% (un dato que contrasta fuertemente con el 81% de junio del año pasado) y la metalmecánica, que registró un 42% de uso de su capacidad instalada, cuando hace un año llegaba al 60,1% (sobre todo por la caída en la producción de maquinaria agrícola y electrodomésticos, reflejo también de la fuerte caída en la demanda)
Otros sectores de la industria que se ubicaron por debajo del promedio, fueron productos minerales no metálicos (46,8%), productos textiles (43,9%), edición e impresión (41,3%), productos de caucho y plástico (39,4%), industria automotriz (39,0%), y productos del tabaco (35,4%). Sólo estuvieron por encima del 54,5% promedio la refinación del petróleo (80,8%), sustancias y productos químicos (66,3%), papel y cartón (60,4%), y productos alimenticios y bebidas (59,4%).