Desde el año pasado, este mecanismo ha estado a la orden del día para empresas que no pueden sortear los efectos de la crisis económica por la que atraviesa la Argentina. De 63 compañías que estaban en procedimiento de crisis en el 2017 ascendieron a 108 este año, lo que significa un aumento mayor al 70%.
El mes de agosto marcó un punto de inflexión y hubo un importante incremento, especialmente desde el sector privado, quien mayormente utiliza esta herramienta prevista por la Ley 24.013 para inyectar en las empresas algunos beneficios que le permitan surfear las consecuencias de una economía en recesión “manteniendo el nivel de actividad y conservando el nivel de empleo”.
Una de las medidas dentro de los PPC fue la firma del decreto, acordado con la CGT, los empresarios y el gobierno de una «cláusula de aviso previo» al Ministerio de Producción en caso de despidos injustificados, donde el organismo deberá buscar los mecanismos para evitar las desvinculaciones, situación que en la realidad el gobierno sigue «incumpliendo» denuncian desde el sindicalismo.
Esta herramienta no es nueva en la Argentina, sino que por el contrario fue ya utilizada en otros momentos de la historia y que vuelve a tomar protagonismo en este momento con un notable incremento en los últimos doce meses del 71,4%.
Las variaciones que confirma el Ministerio de Producción y Trabajo señalan que mientras que el año 2017 fueron 63 las empresas que iniciaron los trámites, durante el año en curso ese número ascendió a 108. Una de las más emblemáticas fue la empresa Carrefour y después siguieron sus pasos muchas otras empresas de gran dimensión.
El incremento se produjo notoriamente en los últimos meses y podría ser aún mayor si no tuviera como impedimento que las empresas declaradas en “procedimiento de crisis” no son sujetas a recibir créditos, o solamente lo son a tasas altísimas.
A pesar del significativo aumento, todavía está por encima el nivel de despidos que oficialmente asume la Secretaría de Trabajo, y especialmente el sector industrial que es quien concentra el 74% de los despidos en los últimos doce meses.