Después de alcanzar su pico de 8,4% en abril y de desacelerarse hasta 7,8% en mayo, la inflación continuaría con esta tendencia decreciente en junio según análisis de consultoras privadas, anticipándose una cifra que incluso podría ubicarse debajo del 7%, sobre todo por los más moderados aumentos en el rubro alimentos y bebidas.
Según datos de la consultora LCG, la evolución de Alimentos y bebidas durante la última semana de junio fue de apenas 0,1%, contrastando con el 2,6% de la semana previa. Desde la empresa añadieron: “La inflación promedio mensual también se desaceleró a 5,6%, y acumula una baja de 3,3 p.p. respecto al pico registrado a principios de mayo. Medida punta contra punta, la inflación en alimentos y bebidas fue del 4,1% en junio”.
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En un análisis desagregado, la consultora confirmó que los aceites encabezaron las subas del mes pasado, con un aumento de 8,5encabezaron las subas del mes pasado, con un aumento de 8,8%, seguidos por productos lácteos y huevos (8,5%), mientras que las carnes sólo subieron un 3,3%, las verduras 1% y las frutas apenas 0,1%.
Desde la Fundación Libertad y Progreso informaron que según sus datos el aumento del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de junio habría sido de 6,8% mensual, marcando “una desaceleración en la tasa de variación del índice de precios al consumidor”, por segundo mes consecutivo.
“Luego de que el INDEC registre cinco meses consecutivos de aceleración, los últimos dos meses muestran una moderación en la suba mensual del IPC. A pesar de lo anterior, esto no necesariamente significa una desaceleración en la inflación. En el segundo trimestre del año la estacionalidad de precios juega a favor, por lo que el IPC suele registrar variaciones mensuales menores a la de marzo. Que el índice de precios de junio sea menor al de mayo está dentro de lo esperable manteniendo la misma velocidad crucero de la inflación subyacente”, explicaron.
