Se desmorona la venta de autos: en abril, la caída es del 50% y siguen los despidos

WOLFSBURG, GERMANY - NOVEMBER 14: New VW cars wait to get loaded onto trucks at the Volkswagen car factory on November 14, 2008 in Wolfsburg, Germany. Many European carmakers are tightening their belts as consumers pull back from new car purchases in the face of the global financial crisis. The Organization for Economic Cooperation and Development, or OECD, reported that Germany has officially slid into recession after two consecutive quarters of negative growth. (Photo by Sean Gallup/Getty Images)

Las concesionarias sigue observando como las ventas de autos, en un contexto plenamente recesivo y sin posibilidad de otorgar facilidades de financiamiento, se desploman en este 2019. Los números son elocuentes: en abril, hasta el momento, se patentaron 40 mil unidades, lo que significa una caída del 50% en relación al mismo mes del año pasado.

Semejante escenario trae como consecuencias despidos en la industria automotriz, en la autopartista y en las concesionarias, sin recuperación en el corto y mediano plazo. Con fortuna, el año terminará con una venta de 550 mil unidades, muy lejos de las 803 mil del año pasado, y además con mucho sobre stock.

Una fuente del sector grafica la situación: «Como el mercado está dolarizado, las terminales insisten con los aumentos de precios por órdenes de sus casas matrices, y no tenemos margen ni poder para no trasladarlos. Pero no está claro todavía si va a haber aumentos. La devaluación impacta en forma directa en los precios: el 20% de las partes de un auto son nacionales y la inflación a su vez incide en estas partes».

Con respecto a las fuentes laborales, señalaron: «La ocupación en el sector seguirá disminuyendo hasta encontrar un punto de equilibrio al nuevo mercado que se espera para 2019/2020 de 500.000/550.000 vehículos». De hecho, en este 2019 se multiplicaron los despidos y las suspensiones en la industria de compañías como Renault, Peugeot, Honda, Fiat y General Motors.

«Calculamos 3.500 despidos y 3.000 suspensiones en el sector. Hubo cierres, como el de Metalpar, que dejó sin trabajo a 600 personas. Era una carrocería con mucha integración nacional que dejó afuera a otras 1.500 personas que no son de Smata, pero están en rubros como plástico o vidrios. Otros fueron retiros voluntarios o achicamientos», sostuvo Ricardo Pignanelli, titular del gremio Smata.

«Con el recorte de salarios, el trabajador pierde todas las cargas. Me doy cuenta de cómo viene el proceso porque en nuestra obra social hay una demanda ascendente de psicología y psiquiatría, porque no trabajar afecta mucho», agregó el dirigente gremial. Según detalló, hoy el gremio cuenta con 85.000 afiliados.