Este martes la Asociación Docentes de Santa Cruz (Adosac) anunció el lanzamiento de un paro y movilización provincial por 24 horas para el próximo viernes 11 de junio. La resolución se adoptó en un congreso provincial docente principalmente como herramienta para reclamar por una recomposición salarial que equipare el aumento del costo de vida, entre otros planteos.
Además de exigir “la vacunación masiva para el sector docente”, uno de los ejes principales de los reclamos del sector tiene que ver con la “multa millonaria” (12 millones de pesos) que le impuso el Gobierno de Alicia Kirchner al gremio docente, por el rechazo a una conciliación obligatoria, en una disputa que ya está judicializada.
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A este respecto, desde el gremio cruceño también denunciaron “la falta de pronunciamiento de nuestra central sindical, la CTERA, en relación con la multa impuesta por el gobierno hacia una entidad de base de la misma como es Adosac”
Entre otros reclamos elevados para la jornada de lucha docente del viernes, se enumeran la denuncia del “intento de intervenir las Juntas de Clasificación”, la exigencia de dejar sin efecto “los sumarios persecutorios” contra distintos docentes “procesados por luchar”, reclamar el normal funcionamiento de la comisión de ofrecimientos, reclamar por el “estado edilicio deplorable de los edificios escolares”, denunciar el mal funcionamiento de la obra social gremial y demandar el fin de la intervención de la misma y exigir “la universalidad en el servicio de internet y la disponibilidad de dispositivos para docentes, alumnos y sus familias”.
La movilización docente se realizará en conjunto con los trabajadores mineros de Río Turbio, al cumplirse un año de la «tragedia evitable» en la mina 5, el pasado 14 de junio, hecho sobre el cual «perdura la impunidad política y empresarial».