La nueva reglamentación sobre la producción de cannabis medicinal da previsibilidad a un sector que estaba aguardando la norma para poder avanzar en el desarrollo del producto y sus derivados, con lo cual muchos emprendimientos se fortalecerán al reparo de una normativa que regule y ordene la actividad.
En ese sentido, Alfredo Camilletti, secretario de Desarrollo Económico de San Pedro, distrito que hace tiempo impulsa un «ambicioso proyecto local» reconoció que “es clave contar con certezas a la hora de producir e invertir, más allá del beneficio medicinal de todos los pacientes que lo utilizan”.
Camilletti señaló que la cuestión incluye una “mirada amplia”, con una fuerte interacción entre los ámbitos público y privado y que contempla las dos visiones en el tema de la producción: “el auto cultivo y la industrialización del cannabis medicinal y de sus derivados -que es muy amplio- porque incluye también a la industria cosmética, de alimentación para animales, textiles y otras”, agregó.
El proyecto que se lleva adelante en San Pedro es diversificado. Para ello han realizado capacitaciones en otros países y cuentan con el apoyo de estudios científicos de universidades o entidades como el INTA que hacen grandes aportes, además del INTI, que también forma parte del plan.
Esta es una ciudad particular donde “tenemos muchas de las producciones frutales, muchos viveros entonces se complementa con esas actividades de las que hoy ya tenemos el know how”, y “esto viene a potenciarnos”, celebró el funcionario.
En ese carácter lo analizó como una gran posibilidad de crecimiento y empleo ya que “además del turismo” una de las actividades principales en el ámbito local, la producción en industrialización del cannabis “abre un panorama muy grande” y nos da muchas posibilidades para potenciar San Pedro”, se ilusionó el funcionario.
Con ese fin, desde el municipio impulsan un Parque Industrial donde toda la cadena participe de eso: desde el que elabora, se especializa técnicamente en el sustrato, en el riego, en la infraestructura y también en toda la industria derivada.
Y en ese marco «lo que hemos pedido a los privados es reservarse un lugar donde -a través del trabajo en red y de organizaciones como Mamá Cultiva y otras instituciones- tengan un espacio para desarrollar su actividad en ese predio y elaboren sus productos dentro de ese marco, que lo tengamos contemplado y sea un trabajo conjunto», detalló.
En cuanto a la comercialización en farmacias y la cobertura por parte de las obras sociales, el hombre de Cecilio Zalazar que admitió que “si bien hasta ayer se estaba “hablando de investigación y desarrollo y de una patología que era la epilepsia refractaria” hizo hincapié en que «hoy es reconocido como un medicamento, y si es un medicamento obviamente que las obras sociales lo deben cubrir”.
Además eso da respuesta al cuestionado tema de la distribución. “La ley que habilita la comercialización a través de la farmacia” y esa «es la forma en que le llegue al paciente», finalizó.
Audio Completo – Estado de Alerta – AM770
