San Juan: Trabajo dictó Conciliación en el paro vitivinícola, que pide recomposición del 100%

Después de que la primera jornada de la medida de fuerza por 48 horas lanzada por la Federación de Obreros y Empleados Vitivinícolas y Afines (Foeva) para exigir un aumento salarial del 100%, este martes por la noche el Ministerio de Trabajo dictó la Conciliación Obligatoria abrir un período de negociación entre las partes, cuyas propuestas se encuentran muy distantes.

La oferta de los sectores empresariales está muy lejos del reclamo gremial ya que ofrecen apenas un 28% de aumento, con una serie de porcentajes remunerativos y no remunerativos hasta febrero 2022 (en noviembre se pagó un bono por única vez de 4 mil pesos). La brecha no logró acortarse después de tres instancias de negociación este martes se concretó el primer día de paro, con bloqueo de la entrada de camiones a las bodegas.

El planteo gremial exige que la remuneración de bolsillo de los trabajadores alcance a la Canasta Básica Total para una familia integrada por dos adultos y dos niños, fijada por la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de la provincia de San Juan en 52.578,10 pesos para febrero. Actualmente, el salario inicial de un obrero de viña es de aproximadamente $27.500 (que puede llegar a $37.000 con una serie de ítems no remunerativos) mientras que el de los operarios de una bodega es de $28.800.

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El secretario de Prensa de Foeva Miguel Rubio reconoció que el reclamo gremial es “alto” en términos de porcentaje, pero sostuvo que en dinero “no es nada”. “Siempre se nivela hacia abajo y hemos llegado a este punto en que no se puede más”, afirmó el gremialista.

Desde los gremios sostienen que el aumento es razonable no sólo por la evolución inflacionaria del año pasado sino también porque se ha aumentado la producción en viñedos y bodegas y la venta de vino se ha recuperado claramente, tanto en lo que hace al abastecimiento del mercado interno como a las exportaciones (durante 2020 la venta de vinos fraccionados al exterior tuvo un aumento de 5,7% y la de vino a granel de 59,8%).

La posición empresaria considera absolutamente inviable un incremento salarial del 100% y destacan que ofrecieron un aumento en línea con lo que cerraron otros gremios en el país en las últimas semanas (alineados con el objetivo oficial de una inflación de 30% para el año en curso), con un 28% de ajuste a diciembre y la intención de reevaluar un extra con los datos a febrero.

Además, un grupo de entidades vitivinícolas (que nuclean a productores, bodegas y establecimientos vitivinícolas y licoristas de la Argentina) expresó su “repudio a las acciones irregulares e ilegales en las que el paro de actividades se llevó a cabo”. Luego denunciaron: “Los bloqueos ilegales de las entradas a los establecimientos vitivinícolas que impidieron el ingreso de uva en plena cosecha para la elaboración de los vinos, de proveedores y de trabajadores que querían cumplir con su tareas; las manifestaciones ilegales en las entradas de las bodegas (piquetes) y las amenazas verbales, daños a vehículos, lanzamientos de piedras y botellas contra las instalaciones de bodegas, constituyen una provocación innecesaria hacia sus colegas trabajadores (personal dentro y fuera de convenio) y un perjuicio económico enorme a las empresas que no pueden desarrollar su actividad”.