Provincia y sus controversias por la vuelta de los docentes a la presencialidad

Luego de la presión que recibiera de los municipios opositores para el regreso a clases, el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires se mostró con un grupo de jefes comunales,  con quienes habría comenzado a plantear el retorno paulatino a las aulas, dando prioridad a los estudiantes con dificultades en el acceso al sistema educativo. Algo similar a lo de la Ciudad de Buenos Aires pero sin fechas que dificulten las negociaciones.

Esta acción fue adelantada por la Directora General de Cultura y Educación bonaerense, Agustina Vila, a 10 intendentes a los que recibió luego de los pedidos de Juntos por el Cambio para retomar la presencialidad en las aulas.

El encuentro fue el viernes, y allí el Gobierno comenzó a definir una “agenda” para planificar la vuelta a las aulas de forma progresiva, con prioridad en aquellos estudiantes con mayores dificultades para acceder al sistema educativo.

Sobre lo planteado, el  intendente de Tigre, Julio Zamora, dijo que la Provincia “va a mandar la próxima semana los protocolos para la vuelta a las aulas, sin generar expectativas” en cuanto a una fecha de retorno. El alcalde precisó además que, en un orden de prioridades, “se pensó en los sectores más complicados para acceder a la educación: aquellos sin internet o a quienes les cuesta asimilar los contenidos educativos” en un contexto diferente al áulico.

Del encuentro participaron los intendentes Mayra Mendoza (Quilmes); Jorge Ferraresi (Avellaneda); Alberto Descalzo (Ituzaingó); Jaime Mendez (San Miguel); Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas); Diego Valenzuela (Tres de Febrero); Julio Zamora (Tigre); Federico Achaval (Pilar); Juan Zabaleta (Hurlingham) y Mariano Cascallares (Almirante Brown).

Valenzuela y Méndez esta semana reclamaron públicamente -junto a otros intendentes de Juntos por el Cambio- la vuelta de las clases presenciales, plegándose a un pedido similar que el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, realiza a Nación.

En tanto, los jefes comunales del oficialismo, si bien trascendió que tendrían como objetivo del encuentro apoyar a la provincia en la decisión de permanecer sin vuelta a las escuelas por éste año, iniciaron el planteo respecto a un posible regreso presencial, a través de mecanismos que, de ninguna forma pongan en riesgo al personal docente ni a los niños, pero que den muestras de interés por establecer alguna forma, aunque sea parcial, de vinculación entre pares, ante la preocupación no sólo por la continuidad del proceso pedagógico sino por una necesidad psico social de los niños y jóvenes.