Según un reciente informe de la Universidad de Avellaneda (Undav), el superávit comercial de 2020, que hasta el momento es de 10.984 millones de dólares para entre enero y agosto, resulta ser el mayor de la última década y el cuarto más alto de los últimos 30 años, desde que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos comenzó a llevar el registro.
En el mismo sentido, el informe de Undav resalta que el Presupuesto 2021 busca aumentar los saldos y la canasta exportadora, en busca de “comenzar un sendero de crecimiento sostenible” con un alza del PBI de 5,5% para el año próximo. Respecto de las exportaciones, la Ley de Leyes anticipa el mayor incremento de exportaciones de la última década.
El estudio de la Undav confirma que el saldo comercial acumulado entre enero a agosto de este año “es el cuarto más alto en 30 años, y se espera que cierre el año con una tendencia similar”. El sector que más exportó este año es el oleaginoso, aportando el 31,3% del valor total (casi el 90% relacionado con la soja, que explica el 28% del total, con el resto derivado del maní, girasol y olivícola). El segundo sector más relevante fue el cerealero, aportando un 20,8% de las divisas ingresadas, seguido por el sector bovino (7,4%), el complejo petrolero petroquimico (7%), el sector metalero, metalífero y de litio (6,4%) y el complejo automotriz (6,3%).
El Gobierno insiste en que no habrá devaluación, porque eso «supone una caída en los ingresos»
En cuanto al sector turístico, fuertemente afectado por la pandemia, se explica que “la cuenta de turismo es históricamente deficitaria para nuestro país, y en especial en momentos de crecimiento económico y atraso del tipo de cambio, dado que se abarata viajar afuera”.
Por supuesto, el superávit comercial tiende a potenciarse en años de crisis en los que caen fuertemente las exportaciones y la diferencia con las exportaciones se incrementa. Así, el superávit acumulado más alto es el de 2009, en plena crisis internacional subprime, con USD 12.456 millones, seguido por los USD 11.966 millones de 2003 y los USD 11.110 de 2002.
“La particularidad es que los grandes superávits coincidieron con periodos de grandes crisis o salidas de las mismas, dado que la explicación principal es la caída abrupta de las importaciones, a una velocidad mucho mayor que las exportaciones”, detalla el estudio.