Desde la CTA de lxs Trabajadorxs de la Ciudad de Buenos Aires repudiaron las declaraciones de la ministra de Educación porteña Soledad Acuña, quien planteó que los chicos que dejaron la escuela durante la pandemia de coronavirus y no regresaron a clases «están perdidos en los pasillos de una villa» o ganados por el narcotráfico.
La central obrera recordó que «no es la primera vez que escuchamos este tipo de declaraciones de la ministra, quien hace sólo unos meses calificó a los y las docentes de fracasados y sin capital cultural, dejando en evidencia su pensamiento clasista y el de toda la gestión del GCBA, lo que se reafirma en las políticas dirigidas al sector educativo».
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Después de recordar el recurrente problema de la falta de vacantes en la Ciudad, la reducción del presupuesto educativo y la falta de dispositivos y conectividad para los alumnos, la CTA señaló que este escenario es el reflejo del «vaciamiento» que lleva adelantea el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta sobre la educación, afectando «profundamente a los barrios más vulnerados».
En el mismo sentido, afirmaron que «es obligación del gobierno porteño incluir a los niños, niñas y adolescentes que no se reincorporaron a la educación en el período de pandemia y no tratarlos como elementos de descarte social».
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En el mismo sentido, la intersindical de cultura Radar de lxs trabajadores consideró que las declaraciones de la ministra fueron «discriminatorias, estigmatizantes y clasistas». También afirmaron que «siguen el hilo conductor del ADN neoliberal» y «no hacen más que mostrar la crueldad y el desprecio por quienes más necesitan un Esetado presente y garante de los derechos sociales». «Nunca es tarde para que los chicos vuelvan a la escuela y es el gobierno de la ciudad Autónoma de Buenos Aires el responsable de generar políticas públicas que garanticen el ejercicio efectivo del derecho social a la educación», concluyeron.
De todos modos, más allá de la Ciudad de Buenos Aires, el problema de la revinculación de los alumnos que perdiero contacto cotidiano con sus ámbitos educativos durante el prolongado perído de pandemia, por no poseer equipos o conectividad para seguir las clases virtuales que los docentes de todo el país estuvieron sosteniendo, es una cuestión nacional. Por eso el Gobierno recientemente confirmó el relanzamiento del programa conectar igualdad, previendo la compra de miles de equipos para alumnos y docentes, buscando revertir en este año lectivo las graves secuelas de los dos anteriores, marcados por la crisis epidemiológica.
Al respecto, el ministro de Educación de la Nación Jaime Perczyk reconoció que a principios de 2021 «había un millón de chicos que se habían desvinculado o con una vinculación intermitente» y que en los últimos registros «había 500 mil chicos que todavía no habían regresado». Por esto, cruzó a su par porteña señalando: «Nunca es tarde para los chicos o chicas, ni siquiera para los adultos. El sistema educativo siempre tiene que dar una nueva oportunidad si queremos construir un país democrático con todos adentro».
