Nuevo round de Caputo vs Cavalieri por el freno al aumento salarial para los mercantiles, acordado entre el sindicato y las cámaras de Comercio.

El Ministro de Economía Luis Caputo dio un nuevo paso para frenar el pago de los aumentos salariales acordados en negociaciones paritarias, por lo que varias cadenas de supermercados no harán efectivo el incremento firmado por la Federación de Comercio (FAECYS) -liderada por Armando Cavalieri-, y las cámaras del CAME, CAC y UDECA, que determina una mejora del 5,4% en los ingresos para el segundo trimestre del año, permitiendo que el básico de los trabajadores mercantiles llegue a $ 1.123.000.-

Caputo pone el eje en la necesidad de contener todo riesgo de incremento en los índices inflacionarios y teme que los expendedores de los productos de la canasta básica de consumo hogareño, trasladen esos porcentajes de mejoras salariales a los precios, además de seguir valorando la herramienta de la no homologación de los acuerdos entre las partes (con inéditas demoras desde la Secretaría de Trabajo), como instrumento para frenar el aumento en el ingreso de los trabajadores.

Cavalieri ratifica acuerdo salarial con CAME, CAC y UDECA, y la Federación de Comercio fija un precedente que relativiza la importancia de la homologación de los convenios paritarios

Existe una discusión de aplicación, donde mientras Caputo argumenta que la no homologación del convenio es suficiente aval para no otorgar los salarios con el incremento acordado, el gremio presentó como sustento legal, el hecho que en el marco de las negociaciones paritarias ¨para el caso de estar pendiente la homologación del acuerdo, y se produzcan vencimientos de los plazos pactados para el pago de los incrementos en la forma escalonada prevista, los empleadores abonarán las sumas en la forma convenida con la mención ‘pago anticipado a cuenta del Acuerdo Colectivo Abril 2025’, el que quedará reemplazado y compensado por los rubros correspondientes una vez homologado el acuerdo¨.

Lo cierto es que son cientos de miles los trabajadores afectados en esta compulsa, con salarios que de esta manera siguen disminuyendo su poder adquisitivo, en función de la inflación que oficialmente dio a conocer el INDEC, al tiempo que también muchas otras organizaciones sindicales pueden quedar involucradas en esta acción de forzar un marcha atrás, en los acuerdos firmados con las patronales de otras actividades, que ahora tendrían la excusa ideal para no hacer efectivos.

Ahora se inicia una disputa judicial con cartas documentos cruzadas, aunque incluso hasta muchos sectores empresariales reconocen como justo dar estos incrementos a su fuerza laboral, en la comprensión que el deterioro del poder adquisitivo real es palpable y contraproducente al poder de compra en el funcionamiento del mercado interno.