Después de que la semana pasada se concretaran una serie de suspensiones arbitrarias de contratados en la comuna que encabeza el dirigente del PRO Néstor Grindetti, el Sindicato de Trabajadores Municipales de Lanús (STML) se declaró en estado de alerta y anticipó un plan de lucha en defensa de los puestos de trabajo, denunciando además la ilegalidad de este tipo de desvinculaciones en el marco de la epidemia y con la vigencia de un Decreto de Necesidad y Urgencia del Ejecutivo Nacional que prohíbe ese tipo de medidas. Desde nuestra redacción dialogamos con el secretario General del gremio, Miguel Pedelhez, quien confirmó la decisión de ir hasta el final en este reclamo por la reincorporación de los cesanteados.
El dirigente confirmó que el conflicto actual se desencadenó la semana pasada mientras el gremio se encontraba comprometido en la defensa de un grupo de 5 trabajadores del sector Tránsito, que habían sido suspendidos, según justificaron desde la Comuna, por no presentarse a cumplir con sus tareas habituales. Mientras desde el gremio se refutaban estos planteos municipales, se supo que en simultáneo otros diez trabajadores del sector Seguridad y Desarrollo sustentable estaban estaban siendo informados telefónicamente por el municipio acerca de su “baja”, por lo que “ya no se tendrían que presentar a trabajar, dado que eran trabajadores esenciales y no estaban cumpliendo sus tareas”.
Según explicó Pedelhez en diálogo con este portal, cinco de estos diez suspendidos se encuentran en aislamiento preventivo obligatorio por ser contactos de un caso confirmado de Covid 19 entre los trabajadores del área. Para el dirigente, esta decisión oficial de despedir a trabajadores que se encuentran en aislamiento por un posible contagio laboral “rebasó todo límite” y justifica una planteo intransigente por la reincorporación de los mismos.
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Para el dirigente “es inaceptable que funcionarios se sientan tan omnipotentes que lleguen al extremo no solo de incumplir con los protocolos y decretos vigentes, sino que además se atrevan a humillar, amenazar, hostigar y acosar trabajadores con métodos de violencia y patoterismo inaceptables en esta democracia que tanto nos costó a los argentinos, y muy especialmente al Movimiento Obrero”.
Pedelhez también denunció que en su contacto con los trabajadores del área de Seguridad Ciudadana, en la cual el gremio no tenía afiliados, descubrieron que esto sucedía no sólo por tratarse de personal ingresado con la nueva gestión de Cambiemos sino también porque había una “prohibición” por parte de las autoridades comunales de que los trabajadores se contacten o se afilien al STML. “Pero más allá de todo esto los compañeros se referenciaron con nosotros”, remarcó el dirigente.
Para el gremio, estas decisiones oficiales no sólo constituyen una serie de “despidos encubiertos” sino que además se producen desconociendo el espíritu del DNU presidencial 329/2020 y sus ampliatorios, dictados con el objetivo de preservar los empleos en el marco de la epidemia de coronavirus.
Ante estos hechos, el gremio llevó adelante una asamblea extraordinaria en la que más de 40 delegados resolvieron declarar personas no gratas para los municipales “a todos los funcionarios, que en claro abuso de poder cometen atropellos e injusticias contra los trabajadores” y exigieron la reincorporación inmediata de los despedidos. También anticiparon elevar las denuncias pertinentes ante el Ministerio de Trabajo y la Justicia. “Estamos dispuestos a la defensa hasta las últimas consecuencias de estos compañeros”, concluyó Pedelhez.
El planteo del STML cosechó la adhesión de numerosos gremios municipales de la provincia de Buenos Aires, incluyendo los de ciudades como La Plata, Hurlingham, Rivadavia, Arrecifes, Pehuajó, Berazategui, Coronel Dorrego, Puan, Tigres, Quilmes, Tres Lomas, 9 de Julio, Chacabuco, Trenque Lauquen, Guaminó, Benito Juárez, Mar Chiquita, San Fernando, San Vicente, Cañuelas, Baradero, Bolívar y otros.
