Mujeres sindicalistas también trabajan por el protagonismo femenino en el acuerdo social

El 34 Encuentro Nacional de Mujeres en La Plata fue otro trampolín para dar visibilidad al nuevo rol de las mujeres sindicalistas. Dirigentes, delegadas gremiales y militantes de la Corriente Federal de Trabajadores de la CGT, CTA y organizaciones de la economía popular estuvieron presentes en el auditorio de la Universidad de Psicología compartiendo experiencias, analizando el presente de las trabajadoras en ésta crítica situación el país y “pensando el futuro.

La masividad fue contundente y símbolo de la fuerza de la militancia que viene empujando discusiones en la agenda pública con signos de “cambio” y la organización y el nivel de los debates demostraron una vez más que la lucha de las mujeres sindicalistas llegó para quedarse.

Vanesa Siley, secretaria general de la Federación de Trabajadores Judiciales (FE-SITRAJU), diputada nacional ya lo manifestó ese día:“Acá está el futuro del movimiento sindical argentino”, una de sus frases iniciales que tuvo como respuesta una de las primeras ovaciones del Plenario.

“Hace mucho que venimos construyendo la unidad, el otro día cuando la CTA de los trabajadores y trabajadoras tomó la valiente decisión histórica de volver a la CGT -dijo refiriéndose al acto en el estadio de Lanús-, nos encontramos en ese acto con miles de compañeras con las que veníamos trabajando en esa construcción”, celebró Siley.

Siguiendo el mandato de los candidatos del Frente de Todos, la idea es transmitir y contagiar la «necesidad de la unidad sindical» convencidos de “Para ser fuerte tiene que ser programática” y que “La unidad no tiene que ser de cúpula, tiene que ser una unidad de bases, de abajo para arriba porque eso la hará duradera”. También la de estar en la mesa de las discusiones.

La situación de las mujeres dentro del ámbito del trabajo ya convoca a múltiples sectores y empieza a pensar espacios de poder en los lugares de toma de decisiones con paridad en el sindicalismo, en la política, en la educación, en la cultura, en  la salud, en todos los lugares donde participan.

Es el caso de las candidatas darán en las urnas el próximo 27 su aporte también a la lucha con sus candidaturas: a diputada nacional por la provincia de Buenos Aires de Claudia Ormachea (Bancarios) y a senadora en la provincia de Buenos Aires, María Reigada (CTA de los Trabajadores).

Otro es el caso de Soledad Alonso,   secretaria de prensa del sindicato de ANSES, -también candidata- desde hace años trabaja dentro del SECASFPI y de la Corriente Federal por un futuro en «igualdad» de género y da «pelea» desde el ámbito de la seguridad social.

 

Así construyen juntas «equipos y proyectos» detrás de fuertes corrientes feministas como la que impulsa desde hace años Dora Beatriz Barrancos, investigadora, socióloga, historiadora y feminista argentina que​ Formó parte del directorio de CONICET, ​ hasta mayo de 2019, cuando renunció en protesta por la reducción presupuestaria del gobierno de Macri que golpeó a la institución.​

Y desde el sector «que nos toque» lucharemos por más y mejores derechos como señaló Mara Rivera, subsecretaria de Género, Juventud e Igualdad de Oportunidades de la Asociación del Personal Superior de Empresas de Energía (APSEE) quien puso la vara de los objetivos de su gremio bien alta: «Vamos a dar la lucha para que las empresas de energía eléctrica vuelvan al Estado. Queremos dar un servicio público de calidad y ese tiene que ser del Estado.», disparó.