Este martes el Polo Obrero, Barrios de Pie, Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) y otros movimientos y organizaciones sociales están llevando adelante una Jornada Nacional de Lucha en demanda del pago de un bono de emergencia de fin de año para jubilados y beneficiarios de planes sociales y Asignación Universal por Hijo (AUH). Se realizarán movilizaciones en 16 provincias. En Buenos Aires, el epicentro del reclamo se ubica en el Obelisco, donde se concentró desde las 10 de la mañana, para luego marchar a la sede principal de la Anses.
A contramano de la Confederación General del Trabajo, que explicitó su intención de “darle tiempo” a la asunción del nuevo gobierno de Alberto Fernández, estas organizaciones sociales plantean la impostergable necesidad del pago de un bono de 4 mil pesos para los sectores más vulnerables de la sociedad argentina, golpeados por la imparable inflación de los últimos meses.
Moyano libera a Alberto pero «apura» a los empresarios con el «bono navideño»
También se plantea la necesidad de abrir más programas de asistencia para las familias de los desocupados, que se apruebe un aumento de emergencia para jubilaciones mínimas, planes sociales y AUH y se regularice la entrega de alimentos en los comedores populares, cumpliendo con el aumento del 50% aprobado en el marco de la reciente ley de emergencia alimentaria (de la que también denuncian su incumplimiento).
Silvia Saravia, coordinadora nacional de Barrios de Pie, afirmó que la situación social “se agrava en todo el país”. Y agregó: “El aumento del precio de los alimentos se suma a que desde el gobierno se han dado respuestas puntuales previas a la elección y, como si no hiciera falta comer todos los días. La insensibilidad llegó a un punto increíble”.
Eduardo Belliboni, dirigente del Polo Obrero, explicó: “Es una jornada nacional de lucha votada la semana pasada en asambleas, preocupados por el avance de una situación que no termina, que es un ajuste permanente. Hemos sufrido nuevamente este aumento de los productos de primera necesidad. Han planificado nuevos aumentos de tarifas y combustibles, lo cual agrava una situación ya grave, con un crecimiento de la desocupación, despidos masivos. Sigue un ajuste que se debería haber detenido, inclusive teniendo en cuenta el resultado electoral. El gobierno ha perdido las elecciones, y por lo tanto ya no tiene autoridad para seguir aplicando medidas contra el pueblo”.
