México: El desabastecimiento de combustible golpea a la economía

La estrategia que implementó el gobierno méxicano de Andrés Manuel López Obrador para terminar con el robo de combustible provocó un fuerte desabastecimiento y largas filas en las estaciones de servicio, además de paralizar la economía. El mandatario prometió que se normalizará la distribución aunque no dio una fecha precisa.

En una de sus primeras medidas al mando del poder Ejecutivo, AMLO decidió cerrar los principales oleoductos vulnerables a las tomas ilegales, que crecieron en los últimos años, y trasladar la nafta en camiones cisterna. Además, ordenó a las fuerzas armadas vigilar 50 puntos estratégicos de Pemex y catalogó el robo de combustible como un delito grave sin derecho a fianza.

«Poco a poco se va a ir normalizando la situación, no caigamos en pánico en compras precipitadas, si tienen combustible, no se preocupen, no se va a acabar la gasolina, administren lo que tienen», dijo el mandatario en un video difundido en sus redes sociales.

El líder de la administración también mencionó que era indispensable cambiar el sistema de distribución y que existen reservas de nafta necesarias: «Tenemos gasolina y diésel suficiente en el país, hay reservas suficientes de gasolinas, es cosa nada más de cambiar el sistema de distribución, controlar los ductos, porque antes los tenían abiertos por completo y se ordeñaban».

Por otro lado, el presidente negó que se esté comprando menos gasolina en Estados Unidos, como publicó The Wall Street Journal. «Es falso lo que dice un periódico de Estados Unidos de que estamos comprando menos gasolina en el extranjero. No, desgraciadamente, estamos comprando más», expresó. «El desabasto es por el combate al huachicol (robo de gasolina), nada más que parece que este periódico no hizo la investigación suficiente», agregó.