Finalmente, el presidente Mauricio Macri logró evitar la aplicación de la cuestionada Ley de Abastecimiento N° 20.680 para congelar el precio de los combustibles por 90 días, como había anunciado en su discurso sobre las medidas de “alivio” del miércoles de esta semana, y optó por un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU). El mismo extiende la medida a todo el sector hidrocarburífero y no sólo a YPF.
La resolución se explica en el complicado escenario político y económico en el que transita el oficialismo después de la debacle electoral de las recientes PASO, donde el Frente de Todos se impuso con el 47% de los votos, lo que fue seguido por una corrida financiera que llevó al dólar a superar los 60 pesos. Ante ese panorama, el Gobierno salió a anunciar algunas medidas, que definió como de “alivio”, entre las que se cuentan una rebaja del impuesto a las Ganancias, la eliminación del IVA de algunos alimentos básicos y el congelamiento de los combustibles por 90 días, que en principio fue resistido por las petroleras.
Las petroleras ya rechazan el congelamiento de combustibles que impulsa el Gobierno
El Decreto 566/2019, que se publicó este viernes en el Boletín Oficial, formaliza el congelamiento de precios por tres meses, estableciendo: “Las entregas de petróleo crudo efectuadas en el mercado local durante los 90 días corridos siguientes a la entrada en vigencia de esta medida deberán ser facturadas y pagadas al precio convenido entre las empresas productoras y refinadoras al día 9 de agosto de 2019, aplicando un tipo de cambio de referencia de cuarenta y cinco pesos con diecinueve centavos por dólar estadounidense ($45,19/USD) y un precio de referencia BRENT de cincuenta y nueve dólares por barril (u$s59/bbl)”.
Tras el fracaso de las negociaciones voluntarias con las petroleras, el gobierno recurrió a la vía del decreto, basándose en la Ley 26.741 de «Soberanía Hidrocarburífera» y no en la de Abastecimiento, como se había anticipado. El DNU firmado por Macri y su Gabinete de ministros también establece que “el precio tope de naftas y gasoil en todas sus calidades, comercializados por las empresas refinadoras y/o los expendedores mayoristas y/o minoristas, en todos los canales de venta, durante los 90 días corridos siguientes a la entrada en vigencia de esta medida, no podrá ser superior al precio vigente al día 9 de agosto de 2019”.
Así, hasta el próximo 14 de noviembre, la mayoría de las estaciones de servicio de YPF de la ciudad de Buenos Aires deberán vender el litro de Súper a $43,80 aproximadamente, el de Premium a $50,43, el gasoil Grado 2 a $40,94; y el gasoil Grado 3 a $47,92.
