Los trabajadores de la agencia pública de noticias esta vez eligieron un «acampe» como modo de protesta frente a la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo y continúan allí desde hace varios días para evitar nuevamente los despidos. El reclamo sigue siendo el mismo que hace meses: que todos los expedientes de los 357 despidos del año pasado sean abordados por el mismo tribunal y no, como pretende el Gobierno nacional, se repartan entre distintos juzgados.
Lxs trabajadorxs de Télam continuamos en la puerta de la Cámara Nacional del Trabajo. Esta mañana tendremos un #ActoPorTelam con la presencia de todo el arco político y sindical. Le decimos basta a las maniobras de @herlombardi en el fuero laboral.#DefendamosTelam#TodxsPorTelam
— Somos Télam (@somostelam) June 4, 2019
En las primeras horas de este viernes instalaron el acampe en Lavalle 1554 de la Ciudad de Buenos Aires, “hasta tanto se cumpla la demanda de ‘Justicia independiente’”, informó la Comisión Gremial Interna (CGI) del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) en un comunicado.
⚠️ #ALERTA I Lxs trabajadorxs de Télam acampamos desde ahora en la Cámara Nacional de Trabajo ante la posibilidad de sufrir nuevamente despidos. La maniobra del Gobierno en el fuero laboral tiene que llegar a su fin.#NoALosDespidosEnTelam#AcampePorTelam#JusticiaPorTelam pic.twitter.com/t4leglCO9M
— Somos Télam (@somostelam) May 31, 2019
Se espera contar con la solidaridad de legisladores, candidatos presidenciales, organizaciones sindicales, organizaciones sociales y referentes del periodismo que ya se han solidarizado con el conflicto y lo venían haciendo por los medios y las redes sociales.
Las idas y vueltas judiciales por los despidos en Télam llevan meses. El año pasado, tras 119 días de paro -la huelga más larga del gremio de prensa en Argentina-, se lograron dos fallos favorables que planteaban la reincorporación.
El plan incluía la derogación del Estatuto del Periodista, la eliminación de la jornada de 6 horas, el cierre de corresponsalías en el interior y la clausura de los controles sobre la pauta publicitaria. Y además, contratar a unos amigos sin idoneidad, cosa que sucedió.
El primero fue de Ricardo Tatarsky, a cargo del juzgado Nacional del Trabajo Nro. 22 que se pronunció sobre cinco casos concretos pero cuyo alcance puede abarcar a la totalidad de las y los despedidos. El juez consideró que la empresa no había justificado (por ejemplo mediante un Procedimiento Preventivo de Crisis) una reducción tan significativa de su personal.
Esto fue ratificado por la Sala V de la Cámara del Trabajo con la firma de los magistrados Enrique Arias Gibert y Miguel Rodríguez Brunengo. Dicho tribunal tenía ahora que resolver definitivamente la situación del resto de las y los despedidos. Pero según denuncia el gremio “el Gobierno nacional comenzó a presionar a la Justicia para que los demás expedientes no recayeran sobre los mismos jueces”.