Tras la polémica instalada a raíz del nuevo aumento de tarifas eléctricas y las consecuencias políticas que el tema ha aparejado, especialmente a partir del pedido del presidente Macri a gobernadores e intendentes de quitar impuestos locales para colaborar con el “ahorro del vecino”, muchos actores se han sumado a la polémica.
La situación del sector fue descripta por el titular de la Asociación de Personal Superior de Empresas Eléctricas,(APSEE), Carlos Minucci, como “muy crítica” y a la hora de buscar responsabilidades disparó munición gruesa contra el gobierno de Mauricio Macri: “nos mienten” –afirmó- frente a la convocatoria de los concejales de Avellaneda para interiorizarse del tema.
Esa afirmación, Minucci la justificó entre otras cosas, en que “las empresas no invierten un peso» -y además planteó- «las tarifas se dolarizaron y quedan todavía subsidios del Estado por 7.000 millones de pesos mensuales que piensan sacar también, con lo cual, si no le damos un corte definitivo a esta situación, el año que viene estaremos pagando el doble de luz sin un mejor servicio”.
A ello sumó también “el enorme costo laboral que están pagando los trabajadores del sector eléctrico” y describió un importante “ajuste” por parte de las empresas para achicar costos, ofreciendo retiros voluntarios a gente experta con años de antigüedad e incorporando mano de obra barata no calificada, sin conocimiento ni capacitación que pone en riesgo su vida y la de otros”.
Por último desmintió que la “pesada herencia recibida” sea la causante del desmedido aumento tarifario, y atribuyó de nuevo al gobierno actual las políticas de flexibilización que permiten ganancias millonarias a empresas con escasa o nula contraprestación.