Luego de que el vicejefe de Gobierno porteño Diego Santilli confirmara la intención oficial de sumas las polémicas pistolas Taser a las fuerzas policiales que operan en el subterráneo, los metrodelegados denunciaron que la medida es “una locura” y anticiparon medidas de lucha.
Hace algunos días el Jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta había admitido que se evaluaba el uso de las pistolas eléctricas en las estaciones de subterráneo: #Siguiendo el lineamiento del Gobierno nacional, la mejor utilización es en lugares cerrados, y el ámbito cerrado más grande y en el que más gente circula es el subte”. Ahora Santilli confirmó la idea en una reciente entrevista radial: “La policía tiene su arma reglamentaria y una ley que tipifica su uso. La Taser será una herramienta más para poder reducir al delincuente en un ambiente más controlado y cerrado, como es el subte”.
Según el vicejefe de Gobierno, la tasa de delito en los subterráneos de Buenos Aires bajó un 86%, destacando la actuación de una policía “más cercana a la gente”. En ese sentido, el funcionario detalló: “Las Taser ayudan a reducir al delincuente. El policía sabe cuándo actuar, y utilizará -además del tonfa y la pistola reglametaria- la Taser, una herramienta no letal”. Santilli anticipó que ya en el mes de febrero las fueras policiales comenzarán a capacitarse en la utilización de las nuevas armas.
Pero las Taser vienen arrastrando polémica a nivel mundial, con numerosos organismos de defensa de los derechos humanos que las califican como instrumentos de tortura y cuestionan su status de “armas no letales”, ya que, por ejemplo, en los Estados Unidos se han registrado más de mil muertes por su uso desde el año 2000.
En nuestro país, la Corte Suprema de la Nación autorizó su uso en la Ciudad en 2016, rechazando un amparo presentado por el militante de H.I.J.O.S. Carlos Pisoni, que planteaba que las Taser X26 constituían instrumentos de tortura y que su uso violentaba derechos personales a la vida, la salud y la integridad física de los habitantes de la ciudad. En el mismo sentido, Violeta Burkart Noé, integrante del Observatorio de DDHH, añade: “Nos basamos en leyes, constituciones y pactos internacional que la Argentina debería cumplir. Lo venimos diciendo desde 2012, cuando querían comprar estas armas y no cumplen con esas normas”.
Noé también cuestiona el status de “no letales” de las Taser: “Se llaman ‘armas menos letales’ pero no quiere decir que no maten. Hay muchos casos probados concretos de muertes por las pistolas Taser, incluso en algunos países que se usaban ya se dejaron de usar. El Comité Contra la Tortura de la ONU dice que son elemento de tortura”.
Luego de las declaraciones de Larreta y Santilli, el secretario General de la Asociación de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP), Roberto ‘Beto’ Pianelli, consideró que la utilización de las Taser en el subte constituye una “locura total”. Y añadió: “No entienden el peligro. Una acción de ese tipo puede generar un caos en el subte. Están manejando una violencia inconcebible”.
El líder de los metrodelegados anticipó que van a realizar una serie de consultas con organizaciones de derechos humanos y que se encuentran evaluando “una acción de protesta todos juntos”. “No se trata solamente de un problema de los trabajadores del subte sino de todos los usuarios y toda la sociedad”, añadió.
Luego explicó que en el subte hay pocas posibilidades de “robo tradicional”, como para que se justifique el uso policial de este tipo de armas. Por el contrario, denunció que la implementación de la medida “va a generar mayores niveles de violencia”. “Vamos a hacer también una campaña pública para convocar a la gente a manifestarse contra esta medida”, concluyó.