Los chalecos amarillos protestan por décimo sábado consecutivo

Por décimo sábado consecutivo los “chalecos amarillos” marchan en Francia contra las políticas económicas del presidente Emmanuel Macron, desoyendo su llamado a abandonar las calles y encarar un debate nacional sobre sus reivindicaciones.

La policía francesa espera una movilización “por lo menos igual a la de la semana pasada”, cuando más de 80 mil personas se movilizaron en distintas ciudades del país, lo que está lejos del pico de noviembre pero marca una reactivación del movimiento.

Desde la mañana, cientos de manifestantes comenzaron a congregarse en la zona de los Campos Elíseos, escenario de los enfrentamientos más intentos durante las protestas anteriores, pidiendo la dimisión del presidente francés.
En París, se convocó a los participantes a marchar con una flor o una vela como homenaje a las personas muertas o heridas “por la causa”. Desde el inicio de la lucha, a mediados de noviembre, ya se registran 10 muertos en accidentes de tránsito y más de 3 mil heridos.

El cuestionamiento de los chalecos amarillos va mucho más allá del reclamo contra el aumento de los combustibles, que Macron congeló hace algunas semanas, y plantea un cambio de rumbo económico global y la dimisión del presidente.

La movilización de este sábado se lleva a cabo pese al llamado oficial a participar de un “gran debate nacional”, que se planea dure dos meses y apunta a discutir las reivindicaciones de los manifestantes y a desactivar las protestas, que continuarán durante el domingo en distintas ciudades del país.