Las reacciones sindicales a la derrota del Gobierno en las urnas: silencio, autocrítica y cambio de giro

La inesperada derrota del oficialismo en todos los niveles de Gobierno, pero particularmente en la provincia de Buenos Aires, bastión de la coalición gobernante, descolocó a los referentes gremiales de todos los sectores del sindicalismo y las respuestas del golpe en las urnas no se hicieron esperar, aunque en algunos casos, fue el mismo silencio, el que se impuso.

Es el caso del secretario general de la CGT, Héctor Daer, quien con su hija, candidata a legisladora porteña, marchó en horas de la tarde al búnker del Frente de Todos, donde finalmente no hubo nada que festejar. Después de eso, en sus redes sociales, el líder de Sanidad, no hizo alusión alguna, a los resultados ni a las expresiones del presidente Alberto Fernández luego de la derrota, a quien en muchas oportunidades ha considerado «un amigo». Solamente se expresó en su carácter de referente de la CGT y saludó este lunes a su par, Agustín Amicone, secretario general del Sindicato del Calzado -UTICRA- que hoy 13 de septiembre celebra su día.

La derrota en las urnas del domingo encendió alarmas dentro del sindicalismo, que si bien es consciente del difícil momento social y económico que atravesamos como país, no imaginó -al igual que todo el arco político y hasta la misma ciudadanía- la magnitud del descontento que se traduciría en los porcentajes obtenidos.

Walter Correa, secretario general de los Trabajadores Curtidores, cuya banca como legislador peligra -a futuro- con éstos resultados, sí decidió expresarse, en el mismo sentido que el presidente, y señaló que “escuchamos el mensaje de las urnas y mañana mismo comenzaremos a avanzar x más justicia social, más desarrollo, más producción y más trabajo para nuestro pueblo”, escribió en su cuenta de Twitter.

Vienen días de debate e intercambio sobre cómo proceder de cara a las elecciones generales y a los dos próximos dos años de Gobierno. La CGT junto a los Movimientos Sociales organizaban una masiva marcha el 18 de octubre, para respaldar la gestión de Fernández de cara a las elecciones generales . Es tiempo de repensar como se dinamizará esa actividad en una Argentina convulsionada.

Omar Plaini, senador provincial del FDT fue otro de los que tuvo algo para decir y se mostró autocrítico de algunas acciones del Gobierno, al que le atribuyó la responsabilidad de no poder mejorar la «pérdida del poder adquisitivo del salario» además de tampoco haber logrado «generar empleo genuino», advertencias que según sus dichos, ya habría hecho hacia adentro en el que habría sugerido dar «un giro de 180 grados» apuntalando al sector privado para que de empleo», en lugar de continuar «administrando pobreza» finalizó el también secretario general de Canillitas.

El camionero, Pablo Moyano, de carácter más combativo, llamó a aglutinarse dentro de la CGT para enfrentar la «embestida que se viene de la derecha». En ese sentido se expresó «necesitamos una CGT unida para ponerle un freno al intento neoliberal de atacar a los trabajadores. Si seguimos dividimos estos tipos siguen avanzando», insistió en vistas de próximas elecciones que se darán también en la central madre, donde el 11 de noviembre se renovarán los mandatos, con enormes interrogantes sobre quien deberá encabezar la nueva conducción de Azopardo para los desafíos que vienen.