Después de la reunión conjunta de las Mesas nacionales de las dos CTA (de los Trabajadores y Autónoma) que se llevó a cabo esta semana, ambas organizaciones ratificaron su voluntad de “profundizar la unidad en la acción para enfrentar las políticas de ajuste del gobierno de Milei” mientras se avanza en la “construcción” de las condiciones a nivel nacional para concretar la reunificación “en una sola CTA”.
“Esta decisión tiene corno sustento nuestro triple compromiso: construir un accionar conjunto para enfrentar, hacer retroceder y derrotar al gobierno y sus políticas; abrir un camino de esperanza para el campo popular en busca de una patria emancipada. justa y equitativa; y organizar la enorme voluntad de lucha, resistencia y propuesta de nuestro pueblo”, explicaron en un comunicado en común.
En el mismo también remarcaron sus intenciones de “establecer un marco para una amplia unidad del campo popular”, para lo que se plantea la importancia de instituir vínculos con movimientos sociales, campesinos. cooperativistas, medianos productores y pequeños empresarios.
En cuanto a lo que se definió como una “agenda mínima urgente” para “poner freno a las políticas de demolición de nuestros derechos y condiciones de vida e, incluso, de nuestra Patria que hoy está en peligro”, ambas conducciones se comprometieron a “ser pilares de unidad y solidaridad con todas las luchas de la clase trabajadora”.
En este sentido, se destacó la importancia de la lucha contra los despidos, tanto del sector público como del privado; la lucha contra el hambre, para lo que se convocará a una Marcha Federal; el fortalecimiento de la campaña para juntar un millón de firmas contra el DNU 70123; la lucha por la educación pública y el presupuesto universitario, en rechazo al prometido veto presidencial de la ley de financiamiento universitario; la solidaridad con jubiladas y jubilados, contra la represión y en defensa del sistema de reparto, por una jubilación digna y universal; el acompañamiento a los aeronáuticos “en su lucha por la aerolínea de bandera y la soberanía del espacio aéreo que intentan desmantelar”.
Además, propusieron la restitución de los fondos a las provincias quitados por Milei (incluyendo al FONID); el ejercicio de paritarias libres y sin techo y la defensa del derecho de huelga y a la protesta social; por un Salario Mínimo, Vital y Móvil “que recupere su capacidad de referencia para que los salarios salgan de la línea de pobreza; para que los programas sociales vuelvan a tenerlo como referencia para un salario digno en el camino a un salario universal”; el repudio a todo intento por parte del Gobierno de “reivindicar la dictadura genocida”; por el no a la Baja de la edad de imputabilidad y por un “marco productivo ecosocial no extractivista compatible con un ambiente saludable”.
Por último, ratificaron su “enérgico repudio” a la Ley Bases y a la reforma y reglamentación laboral impulsada por el oficialismo, “que otorga derechos absolutos a las empresas y trabajos sin derechos para los trabajadores. Repudio al intento privatizados de empresas públicas”, y al DNU 846/2024 “y la tentativa de volver a endeudar al país en condiciones aún más desfavorable a las que ya tiene, bajo el intento de eludir al Congreso de toda decisión de endeudamiento”.