Las centrales obreras denunciaron al Gobierno de Milei en la cumbre de la OIT

Este martes una comisión de dirigentes de la Confederación General del Trabajo (CGT) se encuentra en la ciudad suiza de Ginebra, participando de la primera jornada de la 112 Conferencia Internacional del Trabajo, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), evento que reúne a sindicalistas, empresarios, especialistas en temas laborales y representantes de distintos gobiernos. Los representantes argentinos, entre los que también se cuentan dirigentes de las dos CTA (de los Trabajadores y Autónoma), plantearon fuertes cuestionamientos a la reforma laboral regresiva que impulsa el gobierno de Javier Milei con el proyecto de Ley Bases que, según denunciaron, incluye “artículos inconstitucionales y antisindicales”.

El secretario de Relaciones Internacionales de la CGT y titular de la Uocra Gerardo Martínez lideró la delegación local, participando en la Reunión Preliminar del Grupo de los Trabajadores, de la que participaron referentes de los 187 estados miembros de la OIT. En ese marco, los dirigentes argentinos hicieron pública su oposición a la reforma laboral de Milei, ratificando una defensa irrestricta de garantías y derechos laborales como el de huelga y a la libertad de asociación sindical.

En su intervención ante la Comisión de Aplicación de Normas, Martínez denunció que Milei busca “transferir al sector privado el rol del Estado” y, luego de detallar los aspectos más polémicos del plan de reforma laboral, remarcó que “las políticas que se vienen adoptando en mi país por el nuevo gobierno difieren de los estándares enunciados, a tal punto que colisiona con los conceptos y valores de la justicia social”. Y agregó, cuestionando duramente al oficialismo: “No interviene en la resolución de conflictos, no promueve políticas de empleo, se despreocupa de la formación profesional, pretende limitar la negociación colectiva y se ausenta de sus obligaciones de combatir el trabajo no registrado con el debilitamiento de la inspección laboral”.

“Mediante un decreto de necesidad y urgencia, el Poder Ejecutivo, sin consulta con los actores sociales y a la sociedad civil, sin acudir al Poder Legislativo pretendió introducir la reforma laboral más regresiva desde que recuperamos la democracia. Una reforma precarizadora y antisindical, con la finalidad de imponer un conjunto de políticas económicas y reformas estructurales que dañan las condiciones de vida y restringen el ejercicio de la libertad sindical”, concluyó el dirigente de la construcción.

También el Secretario de Relaciones Internacionales de la CTA Roberto Baradel intervino en el mismo ámbito de la OIT para destacar la importancia de la justicia social (una consigna demonizada por Milei) como elemento fundamental para el desarrollo sostenible y para la realización de la sociedad. El dirigente de Suteba sostuvo que “el gobierno ha promovido distintas políticas que han destruido la administración del trabajo y las políticas de empleo”. Y denunció que los proyectos que impulsa el Gobierno “constituyen un plan sistemático de cambio del patrón de acumulación que beneficia a sectores concentrados y viola de forma sistemática derechos y garantías sociales que gozan de la más alta protección constitucional”.