La semana pasada la aerolínea LAN Argentina, filial de LATAM, confirmó su cierre definitivo, ratificando la perspectiva trazada el pasado 17 de junio cuando anticipó que dejaría de operar vuelos de cabotaje en nuestro país y avanzaría hacia el fin de su filial local. El anuncio de la empresa incluyó la confirmación de un acuerdo de retiro voluntario con algo más de 1500 de sus 1715 trabajadores, mientras que 193 optaron por la vía judicial.
El pasado viernes 5 por la noche la empresa comunicó a los sindicatos del sector y a los 193 trabajadores que no aceptaron el retiro voluntario que la relación laboral estaba extinguida por el cierre definitivo de las operaciones locales. “Lan Argentina S.A. es consciente del impacto de este doloroso pero inevitable proceso y reconoce el esfuerzo y compromiso de todos sus colaboradores a lo largo de estos años”, explicaron.
La decisión de LAN confirma el lugar central de Aerolíneas Argentinas en el mercado aeronáutico local, que un año atrás manejaba el 59% de los vuelos locales (compartiendo un 16% con LAN, un 9% con Flybondi, un 7% con Norwegian y un 1% con Andes) y ahora saltó hasta el 80% (Jetsmart capturó un 11% y Flybondi un 7%), aunque con una cantidad de vuelos mucho más reducida por el contexto de epidemia.
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En ese sentido, desde LAN explicaron: “El impacto que ha tenido la pandemia del Covid-19 en la filial argentina y la dificultad de generar los múltiples acuerdos necesarios para enfrentar la situación actual configuraron un escenario en extremo complejo, donde no fue posible visualizar un proyecto viable y sustentable en el tiempo, generando que Lan Argentina dejara de volar desde y hacia 12 destinos domésticos después de 15 años de operación ininterrumpida. Sin embargo, los cuatro destinos internacionales que cubría la empresa a Estados Unidos, Brasil, Chile y Perú continúan siendo operados por las otras filiales del grupo”.
Desde la empresa aclararon que ya se devolvieron los hangares que LAN utilizaba en Aeroparque y todos los espacios comerciales en los aeropuertos de todo el país. El espacio de oficinas de la empresa se redujo, acordando apenas la permanencia de unos 300 empleaos para realizar tareas comerciales y de administración para Latam Perú, Brasil y Chile. En cuanto a los pasajeros que habían comprados pasajes, si eran para vuelos domésticos se gestiona su devolución y si eran para internacionales se transfieren a otras filiales del grupo empresario.
Hay seis aviones de la empresa que permanecen en Aeroparque, que según Lan deberían ser devueltos pero podría ser que su destino quede sujeto a las negociaciones con los 193 trabajadores que no acordaron el retiro voluntario.
