El Gobierno finalmente, y pese a presiones de empresarios, le puso fecha a la prorroga de suspensión de despidos sin causas: será hasta el 30 de septiembre. Esto quedará plasmado en un decreto de necesidad y urgencia de próxima aparición en el Boletín Oficial.
De acuerdo a fuentes oficiales, el nuevo DNU será similar al que publicó la Casa Rosada en marzo, prohibiendo “efectuar despidos sin justa causa y por las causales de falta o disminución de trabajo y fuerza mayor” por 60 días más, es decir hasta fin de septiembre, y también “efectuar suspensiones por las causales de fuerza mayor o falta o disminución de trabajo”.
No son pocos los empresarios que han indicado que «si prorrogan despidos, van a lograr que muchas empresas vayan a convocatoria de acreedores y negocien con empleados la salida de las suspensiones y reducciones de turno». Lo cierto es que, con los números en la mano, los datos del mercado laboral preocupan: el Ministerio de Trabajo y la AFIP establecieron que, en los primeros cuatro meses, ya hubo 300.000 empleos registrados menos y cerraron (o se pasaron a la informalidad) más de 18.000 empresas en abril y mayo.
Pese a presiones de empresarios, el oficialismo piensa prorrogar la prohibición de despidos
Con este escenario, el Frente de Todos decidió una flexibilización de la cuarentena, pese al incrementos de casos de Coronavirus, autorizando distintas reaperturas de actividades en pos de recuperar levemente la economía, siempre con los protocolos sanitarios correspondientes. Aunque el propio oficialismo advirtió que puede dar marcha atrás si los positivos se siguen incrementando.
