La oposición con duras críticas al gobierno hizo su celebración patria

Marcha en la Av 9 de Julio encabezada por Hugo Moyano y Camioneros. Fotos Emmanuel Fernandez

Bajo la consigna «La Patria no se rinde», un amplio arco opositor liderado por sindicatos, movimientos sociales, agrupaciones kirchneristas, partidos de centroizquierda,  organismos de Derechos Humanos y artistas protagonizaron una concentración por el Día de la Independencia en el centro porteño, donde abundaron filosas críticas al Gobierno y al Fondo Monetario Internacional (FMI).

La convocatoria le dio continuidad a la realizada el pasado 25 de mayo frente al Obelisco, cuando recién se había dado a conocer la intención del Gobierno de ir a un acuerdo de financiamiento con el FMI. Como en aquella oportunidad, la convocatoria fue de gran difusión en  las redes sociales por los organizadores que estuvieron sobre el escenario montado sobre la Avenida 9 de Julio en la intersección con Avenida Belgrano.

Los sindicatos conformaron una nutrida columna, no casualmente los que oponen mayor nivel de confrontación al Gobierno nacional, como las dos CTA (la de Hugo Yasky y la de Pablo Micheli) y el secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, a quien se lo vio cerca de su hermano Facundo Moyano, otro diputado del Frente Renovador que soltó amarras de Massa.

Las columnas militantes se desplegaron a lo largo de la 9 de Julio y se destacaron por su tamaño las de La Cámpora y Nuevo Encuentro. Los diputados Máximo Kirchner, Agustín Rossi y Axel Kicillof encabezaron la tropa K, en la que también pudo verse a Cristina Álvarez Rodríguez, Daniel Filmus, Jorge Taiana, Martín Sabbatella, Andrés Larroque, Luis D´Elia y Mayra Mendoza.

Los movimientos sociales y fuerzas políticas de centroizquierda enmarcadas en el frente «En Marcha» tuvieron su propia columna, que luego confluyó con Unidad Ciudadana en el mismo acto.

Esa columna estuvo encabezada por dirigentes como Juan Grabois (CTEP), Emilio Pérsico (Movimiento Evita), Daniel Menéndez (Barrios de Pie) y Leonardo Grosso (Movimiento Evita), al tiempo que sumó a diputados del Frente Renovador que ya no responden a Sergio Massa como Daniel Arroyo y Felipe Solá (éste último manifestó su intención de ser candidato presidencial).

La movilización culminó con un acto breve en la que los actores Romano y Papaleo leyeron un duro documento político en el que instaron a «romper las cadenas» del endeudamiento que se engrosará a partir del empréstito por más de 50.000 millones de dólares contraído con el FMI.
«Rompamos las cadenas que nos impone el acuerdo alcanzado por el gobierno de Mauricio Macri con el Fondo Monetario Internacional, que sólo le ofrecen a nuestro pueblo un destino de miseria planificada», sentenció el texto.