La CTA de los Trabajadores, la central obrera encabezada por Hugo Yasky, lanzó una campaña para exigirle al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires la implementación de iniciativas “complementarias” al Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP) y al Ingreso Familiar de Emergencia (IFE).
“Por el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) y por la falta de políticas públicas de parte del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, muchxs trabajadorxs, pymes y comerciantes se encuentran en situaciones de vulnerabilidad económica”, detallaron desde la CTA.
En el video que pusieron a circular para difundir la iniciativa explican que en la Ciudad de Buenos Aires “por el coronavirus y la falta de políticas económicas del gobierno de Larreta pueden cerrar más de 25 mil locales”. Luego aseguran que el gobierno porteño “no hizo nada” por los pequeños comercios, por las PyMEs, por los bares y restaurantes, por los hoteles, por las peluquerías y por las tiendas de ropa, mientras que el Gobierno Nacional le otorgó a todos estos sectores un ATP de 33 mil pesos.
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En el mismo sentido, más adelante enumeran que en la Ciudad hay monotributistas, trabajadores de cooperativas, vendedores ambulantes, artesanos y trabajadores de la cultura para los que el Gobierno de Larreta no hizo “nada” mientras que desde Nación se garantizaron ya tres cobros del IFE.
La CTA exige un IFE porteño complementario del que dio el Gobierno nacional de 10 mil pesos y un ATP porteño complementario del que otorgó el Gobierno nacional de 33 mil pesos a cada trabajador que trabaja en relación de dependencia. Para complementar estos aportes del Gobierno nacional se propone que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires implemente programas que garanticen ingresos por los mismos montos a los trabajadores de la Ciudad.
Este miércoles se confirmó que el gobierno bonaerense de Axel Kicillof lanzará un programa similar al ATP, denominado Programa de Preservación del Trabajo (PPT), que tiene por objeto contribuir al sostenimiento de las fuentes y puestos de trabajo en aquellos sectores económicos de la provincia particularmente afectados por el coronavirus. La ayuda para el pago de sueldos equivale al 50% del Salario Vital y Móvil ($16.875) por un plazo de tres meses.