La crisis obligó a Expofrut a entregar también su sector exportaciones

La frutícola Expofrut, del Alto Valle de Río Negro, dejó de operar como exportadora, profundizando la desinversión y dando cuenta de la profundidad de la crisis del sector.

La empresa controlada por el grupo belga Univeg, que supo ser una de las líderes exportadoras de frutas a nivel nacional (principalmente peras y manzanas, pero también cítricos y uvas), proveyendo al mundo productos de Río Negro, San Juan, Entre Ríos y Salta, provincias donde tenía plantas de empaque y procesamiento, comenzó un proceso de achicamiento a partir de 2016, cerrando establecimientos y reduciendo personal.

Para 2019 sólo le quedaba un único galpón de empaque desde el que distribuía fruta para el mercado interno y la exportación. Sin embargo, luego de la reciente campaña de frutas de pepita, incluso debió resignar el abastecimiento internacional, que quedó en manos del Grupo Prima, que hace unos meses también aprovechó la crisis del sector para hacerse con la histórica compañía Moño Azul.

Así, el Grupo Prima, encabezado por el empresario Hugo Sánchez, concentra ahora la mayor parte del negocio de las frutas de pepita en el Alto Valle, estableciendo también los precios que los productores recibirán por sus frutas (en muchos casos por debajo de los costos de producción, según denuncian los fruticultores).

Expofrut se concentrará ahora en el mercado interno, aunque se especula con la posibilidad de que la deuda millonaria de más de 600 millones de pesos que mantiene con el Banco Central la obligue a retirarse completamente de operaciones.