Este miércoles volvería a reunirse la “mesa chica” de la Confederación General del Trabajo (CGT) para definir las medidas a seguir contra la restitución del Impuesto a las Ganancias, en el marco más general de una nueva etapa en la relación con el Gobierno de Javier Milei. En este sentido, se analizará si hay acuerdo con la estrategia definida por algunas confederaciones de no impulsar demandas judiciales únicas y centralizadas, como la que la central obrera presentó contra el DNU 70, sino una oleada de planteos de gremios y particulares.
El encuentro se concretará en la sede de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), un gremio cuyo titular, Andrés Rodríguez, representa, junto al secretario General de la Uocra Gerardo Martínez, a los sectores más dialoguistas de la central obrera, que buscarán suturar las heridas con el sector de Pablo Moyano, que impulsó una política mucho más confrontativa con el oficialismo en el marco del debate de la Ley Bases en el Congreso.
La promulgación de La Ley Bases abre una etapa de reclamos gremiales y de organizaciones sociales
Este sector, precisamente, resolvió la semana pasada en un encuentro en la sede de la Confederación de Trabajadores del Transporte (CATT) y en acuerdo con la “Mesa Intersindical El salario no es Ganancia” (integrada por más de 60 gremios), esta política de impulsar una ola de presentaciones judiciales contra el retorno de Ganancias, además de convocar a una gran movilización ante el Palacio de Tribunales para acompañar algunas de las presentaciones, “a fines de julio o principios de agosto”, con confirmó el propio Moyano.
La central obrera decidió, luego de la aprobación en Diputados, impulsar la creación de una “mesa técnica” con los gremios que se oponen al retorno del Tributo y, según trascendió, ya la semana próxima los abogados de la CGT estarían en condiciones de presentar un análisis técnico de los recursos para enfrentar la vuelta de Ganancias.
“Estamos haciendo un análisis integral dentro del Consejo Directivo de la CGT. Siempre levantamos la bandera -desde la CATT también- de que el salario no es ganancia. Esta semana tenemos una reunión con nuestros asesores letrados que nos van a dar un panorama integral de qué es lo que convendría como para llevar adelante una acción en la Justicia. Hay distintas opiniones, con distintos puntos de vista, y hay reuniones con otros compañeros de sindicatos que también están asesorándose. Vamos a trabajar en conjunto”, explicó Sergio Sasia, titular de la CATT y de la Unión Ferroviaria.
En las últimas horas, las posiciones más confrontativas de sectores como los Camioneros, los bancarios conducidos por el también diputado nacional Sergio Palazzo o los metalúrgicos de Abel Furlán, se encontraron con una confluencia inesperada con el gastronómico Luis Barrionuevo, quien (en el marco de tensiones con el Gobierno por un supuesto apoyo a su ex cuñado Dante Camaño en interna porteña del sector) empezó a plantear la necesidad de avanzar con un paro general de 36 horas.
En ese contexto, la CGT ya dió “libertad de acción” para que cada gremio plantee recursos judiciales si lo considera necesario y confirmó que no participará del acto por el “Pacto de mayo” que el Gobierno concretará este martes 9 de julio en Tucumán. “Ir para una foto, no tiene ningún sentido”, se definió desde el triunvirato cegetista tras la invitación del Gobierno al acto del que participarán gobernadores, legisladores y diversos referentes políticos nacionales (interpretando también la propuesta oficial como una invitación realizada a destiempo y sin fundamentos claros). Más allá de las tensiones abiertas entre los distintos sectores de la central obrera, Gerardo Martínez aseguró que “No hay nada que altere la unidad, ni lo va a haber”, anticipando una política que, pese a los tanteos dialoguistas, está claro que no buscará un alineamiento inmediato.
