La CGT anticipa el paro más contundente de los últimos años

Con la adhesión de todo el transporte público, los bancos, docentes y comercio, los sindicatos están confiados en que el paro será un éxito. Ya anticipó la CGT, a través de sus secretarios generales, que será la huelga más potente desde hace años.

Hubo además frases poco felices como la del ministro Frigerio, que señaló “que la gente ni sabe por qué paran” u otras como la del ministro de Trabajo, Jorge Triaca que afirmó que «El paro es innecesario y no resuelve los problemas» que no caen bien en las bases trabajadoras, hartas de pagar siempre el ajuste frente a los desequilibrios de la economía.

Todo esto hace pensar que este lunes la paralización de la actividad sea total, con una participación masiva de organizaciones gremiales de todas las vertientes, desde los dialoguistas de la CGT hasta los más combativos, que no descartan piquetes en los ingresos a Buenos Aires.

El principal reclamo está hoy centrado en  una reapertura de paritarias, donde el 25% de aumento que firmó Camioneros aparece como un piso antes que un nuevo techo. Los cegetistas más duros anticipan que el deterioro de la situación social y económica obligará a los negociadores a sumarse a nuevas medidas y anticipan que esto es sólo el comienzo.

Se suma que el fuerte ajuste del gasto público afectará incluso a los gremios más conciliadores, que en casi todos los casos dependen de subsidios o la iniciativa pública para garantizar su nivel de actividad y sus salarios.

Los más moderados afirman, por su parte, que la medida permite descomprimir para avanzar en un esquema de ajustes salariales en varias etapas, que permitirá llegar a fin de año con un aumento en línea con la inflación.

El panorama es muy incierto y también las futuras decisiones del gobierno. El cambio de caras en el gabinete trajo algo de tranquilidad pero no es una razón suficiente para creer que eso puede funcionar a largo plazo.

Esa intranquilidad juega a favor de la medida, que según dicen, logrará una adhesión mayor en comparación con todas las medidas efectuadas contra el kirchnerismo, porque solo una parte de la CGT y las CTA –divididas entre oficialistas y opositores– adhirió a esas medidas de fuerza.

Todas las corrientes internas de la central peronista serán parte de esta medida, con las oficialistas 62 Organizaciones, que lidera Ramón Ayala, como única excepción. La Corriente Sindical de Sergio Palazzo confirmó que todos sus gremios serán parte del paro, incluidos los bancarios, que anticipan una fuerte adhesión.

El Movimiento Argentino de Acción Sindical (MASA)  sumó a gremios estratégicos como la Unión Ferroviaria. También Camioneros será de la partida a pesar de sus diferencias con la conducción de la CGT.

En el sector aeronáutico la adhesión será plena, según confirmaron los Sindicatos Aeronáuticos Unidos y aunque alguna aerolínea quisiera operar dependerá de los servicios de control aéreo y de pista, que no están garantizados en ninguno de los aeropuertos del país.

La pregunta sobre el día después todavía no tiene respuesta. Pero sea cual sea, las medidas de fuerza continuarán, sobre eso también existe coincidencia dentro de los movimientos sindicales, aunque la deseada unidad todavía esté lejos.