En la provincia de Buenos Aires, la canasta navideña tendrá un encarecimiento del 65% con respecto al año anterior, mientras se registró una inflación del 50% aproximadamente, según expresó la Defensoría del Pueblo bonaerense, que realizó un exhaustivo relevamiento de productos y alcanzó esta conclusión.
De acuerdo a la mencionada entidad, la canasta pasó de costar $ 4.483,02 en 2018 a $ 7.380,32 en 2019 lo que implica un incremento del 64,63% en un año y un acumulado en los últimos dos años de 148,87%. Los principales aumentos fueron para los frutos secos, como avellanas, almendras y nueces, con alzas de entre 75 y 85 por ciento.
Hoy, un kilo de avellanas cuesta 480 pesos, un 84,6 por ciento más que un año atrás. Siguen en incrementos las almendras, a 430 pesos el kilo (72 por ciento) y las nueces a 350 pesos (75 por ciento). En pan dulce, los aumentos, dependiendo la marca, van desde 41 hasta 63 por ciento.
Aumentos de naftas, prepagas y alimentos sin freno siguen golpeando el bolsillo
En tanto, las garrapiñadas se encarecieron 60,7 por ciento y el turrón vale un 37,6 por ciento más. En bebidas, el Champagne Fresitas se vende a 340 pesos, un 41,7 por ciento más que un año atrás, para la marca Federico de Alvear el precio es de 199 pesos (17,1 por ciento) y la sidra Real, a 149 pesos (98,7 por ciento).
Ante este panorama, distintos supermercados han decidido armar canastas económicas, con sus propios productos, para que sean más accesibles para los consumidores, que han visto a lo largo del año sus bolsillos deprimidos por la inflación y la perdida de su poder adquisitivo.