Jerárquicos del gas: La crisis del gas se puede resolver con una visión de “servicio público”

Desde la Asociación de Personal Jerárquico del Gas (APJ Gas) denunciaron que el problema fundamental que derivó en la actual crisis de desabastecimiento de gas natural tiene que ver con la “gestión gubernamental” y afirmaron que la situación “se puede resolver con otra visión del servicio público y con el aporte de los trabajadores”.

Hace días que, producto de la inoperancia oficial del Gobierno de Javier Milei, hay estaciones de Gas Natural Comprimido (GNC) desabastecidas (en Córdoba se suspendieron «por tiempo indefinido» las ventas a las 0 horas de hoy y durante el día de hoy la restricción podría extenderse a todo el país en lo que sería una situación inédita en la historia) y sin poder funcionar en todo el país, así como también industrias y hasta generadoras eléctricas que debieron frenar su producción por la falta del fluido. Esto también se traduce en baja presión en el servicio residencial. Desde APJ Gas remarcaron que esta situación era absolutamente evitable y que el problema fue “de gestión gubernamental y de atención a las alertas que emite el sistema”. Al respecto, añadieron: “Puntualmente, la crisis de estos días se debió a un problema de gestión y a un problema técnico”.

Desabastecimiento de gas: APJ Gas responsabilizó al Gobierno por privilegiar lógicas «de mercado»

En este sentido, detallaron que el Gobierno nacional contrató de urgencia a Brasil un barco con GNL (gas natural licuado, que luego se transforma en natural) por un valor de 44 millones de dólares. Aunque era necesario acreditar la mitad de ese dinero para que la provisión se ejecutara, por un problema administrativo eso no se concretó, haciendo que el barco no iniciara con la operación, manteniéndose a la espera del pago correspondiente. Mientras tanto, otro barco que sí estaba ingresando GNL al sistema, descargó todo el fluido que tenía y se quedó sin líquido a las 12 de la noche de este martes.

Ante la falta de flexibilidad de Brasil, reflexionaron: “En el mundo de la energía las cosas no funcionan con este nivel de improvisación y, además, cuando la política exterior argentina está dominada por la demonización permanente de gobiernos que no comulgan con su visión del mundo y se los acusa en forma sostenida de ser parte de los males del planeta, no puede haber sorpresas. El frío está presente hace varias semanas. El pago se podría haber hecho con un tiempo prudencial pero no se hizo. Las consecuencias las pagamos todos/as”. Más allá de que, por medio del vocero presidencial Manuel Adorni, el oficialismo asegura que el problema de suministro ya quedó resuelto, que otro barco haya comenzado a descargar no implica el restablecimiento inmediato, ya que se requiere de un proceso que puede demorar hasta 48 horas.

El gremio además destacó que hubo “problemas técnicos” en dos plantas de Transportadora Gas del Norte (TGN) que se resolvieron “con el concurso de los trabajadores/as que realizaron tareas durante más de 12 horas para reparar el problema”, lo que también implicó menor cantidad de gas en el sistema durante unas horas, aunque a la medianoche el inconveniente quedó resuelto. Al respecto, añadieron, recordando que el proyecto de Ley Bases que impulsa el Gobierno nacional incluye la restitución del Impuesto a las ganancias para la cuarta categoría: “Demás está decir que a muchos de esos trabajadores/as se los perjudicará con el cobro del impuesto a las ganancias con los haberes del mes próximo. Cuando nos necesitan nos llaman sin pérdida de tiempo. Cuando tienen que reparar en soluciones económicas lo primero que hacen es meternos la mano en los bolsillos a quienes resolvemos los problemas del servicio público”.

“Insistimos que la energía no es un compartimento estanco. Es parte de un engranaje integral que requiere otra visión del servicio público. El Estado debe jugar un papel decisivo. Las prioridades no se pueden delegar. La planificación es central. La improvisación no es buena consejera. El “libre mercado” no resolverá los problemas de política pública. El invierno venidero será uno de los más crudos de los últimos años. La Naturaleza ya avisó. Las respuestas quedan en manos de seres humanos que gobiernan. Depende de la visión que tengan será el tenor de las consecuencias. La energía, el uso de racional de los recursos no renovables, las relaciones exteriores, el salario de los trabajadores/as, la presión impositiva creciente son parte del mismo problema. No hay secretos. Está todo a la vista. La política manda”, concluyeron.