Indec confirmó la distribución del ingreso más desigual de los últimos 13 años

Al compás de la recesión económica, el aumento de la pobreza y la destrucción de puestos de trabajo, crece la desigualdad en cuanto a la distribución del ingreso. El 10% de la población más rica se apropia del 32,8% de los ingresos totales, marcando una clara concentración. Las cifras del Indec confirman el peor registro en trece años.

La herramienta utilizada para medir la desigualdad en la distribución del ingreso es el llamado Coeficiente de Gini, que considera que a 0 como igualdad perfecta y a 1 como el valor más regresivo y desigual. En el segundo trimestre de 2019 este indicador alcanzó los 0,434 puntos, aumentando notoriamente desde los 0,422 del año anterior. Esta cifra relevada por el Indec representa el peor registro en trece años para ese período (en 2006 se registraba un 0,438, pero con tendencia a la baja después de los picos de 2001).

En el segundo trimestre de este año, el 10% de la población con mayores ingresos familiares obtuvo 20 veces más que el segmento menos favorecido (en 2018 la diferencia era de 18 veces). Este sector también se apropia del 32,8% de los ingresos totales, un porcentaje que supera al que obtiene el 60% de menores ingresos.

El sociólogo Daniel Schteingart explicó: “En la primera mitad del año, la inflación siguió muy elevada, lo cual impidió que las familias recuperen aunque sea algo del poder adquisitivo perdido a lo largo de todo 2018. A pesar de las medidas oficiales para contener el impacto de la recesión, como el aumento del 47 por ciento de la Asignación Universal por Hijo en marzo, los más afectados fueron los trabajadores más humildes, cuyos salarios subieron menos que los del resto. Los ingresos de los trabajadores más pudientes como los profesionales perdieron, aunque el impacto fue menor”.

El especialista añadió: “Hay una doble regresividad. Los ingresos de los más pobres suben por debajo de los más acomodados y al mismo tiempo los segmentos más vulnerables experimentan aumentos de precios más intensos por la fuerte suba de los alimentos por encima de la canasta total”.

Los datos del Indec muestran también que la mitad de los hogares tenía un ingreso promedio inferior a los 28.591 pesos, mientras que el ingreso promedio del sector superior era de 116 mil pesos (aunque se considera que en los sector altos siempre existe una tendencia a la subdeclaración). El 10% de los hogares más pobres tuvo un ingreso promedio de 7489 pesos.