Este jueves el Senado aprobó el DNU que declara servicios públicos a la telefonía, internet y la televisión paga. Fue por 41 votos a favor y 26 en contra y Juntos por el Cambio rechazó la medida. Ahora deberá ir a la Cámara de Diputados para su sanción final.
Sobre el tema, Gustavo López, vicepresidente del ENACOM, organismo que reglamentará la ley, consideró el proyecto como la “reparación de una cuestión de injusticia”. Según expresó en diálogo con Estado de Alerta, la pandemia “ha puesto negro sobre blanco que esto es un servicio esencial” y que la comunicación es un “derecho humano básico”, afirmó.
A modo de ejemplo López graficó que “lo que el agua potable o las cloacas eran al siglo XX la conectividades al siglo XXI” y consideró fundamental el “acceso a las herramientas de información y comunicación”, cuestión que atraviesa el DNU que impulsó el Ejecutivo.
El DNU además de “declarar como servicio público a todas estas actividades” establece “una tarifa social”. Lo que significa de ahora en más que “a partir de este momento los aumentos no son unilaterales sino que se tienen que conversar y lo tiene que autorizar el gobierno”, apuntó el funcionario.
También le dio un fuerte significado a “abrir una oportunidad para que las pequeñas, las medianas empresas y las cooperativas” para que puedan “hacer un desarrollo mayor de sus redes en aquellos lugares donde no llegan los otros.
Paralelamente confirmó que “habrá una fuerte inversión del Estado” y según expresó “ya la semana pasada sacamos programas por 4 mil millones de pesos para dar conexión a barrios populares y para dar conexión a escuelas y hospitales”, algo «imprescindible» para estudiar, para el conocimiento, para el trabajo, para la cultura.
López, pese al malestar de las empresas con la medida, aseguró “que habrá inversiones que no se han hecho anteriormente” y que las “compañías deberán devolver en una nota de crédito los aumentos que hayan efectuado porque eso es lo que se acordó”.
Allí el hombre vinculado a la ley de medios, volvió a hacer hincapié en «avanzar contra las desigualdades» y remarcó la diferencia con el gobierno anterior donde se “jugó a la concentración” y “se dejó a la deriva al usuario o al consumidor” con una “reducción en la inversión pública de un 75% a la que responsabilizó de que “en muchos lugares del interior no tienen ni siquiera 4G y algunos lugares de la Ciudad de Buenos Aires, el Gran Buenos Aires o de las grandes ciudades tienen un servicio para nada satisfactorio”.
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